El Ayuntamiento de Zaragoza espera un aluvión de peticiones de ayudas de urgente necesidad para hacer frente a la factura de la luz a partir de enero. Será en los recibos de diciembre y el resto del año cuando los hogares noten el disparatado incremento del coste de la electricidad. También cuando sufran los efectos de la inflación y la subida generalizada de los precios. Los efectos ya se están notando y prueba de ello es que este año se han duplicado las solicitadas de ayudas para pagar el recibo de la electricidad. También para poder cumplir con el pago del alquiler.

Los datos lo dicen todo y hasta el 31 de octubre se han registrado 34.499 solicitudes de ayudas de urgencia, de las que el 94% se han concedido. Durante este año, y en comparación con 2020, el número de peticiones para recibir una ayuda para el pago de la luz se han incrementado un 95,57%, pasando de las 805 a las 1.408, que representan el 4,08% del total y el 2,57% del importe concedido. El consistorio ya ha destinado 236.127 euros a este fin, frente a los 141.304 del pasado ejercicio, con una media por ayuda de 177,41 euros, unos 10 euros menos que hace un año.

El concejal de Acción Social, Ángel Lorén, explica que este pico es solo el principio porque es ahora, con la llegada del invierno, cuando se va a producir una mayor demanda eléctrica. Las familias vulnerables, incide, alargan la vida de sus electrodomésticos por lo que, en la mayoría de estos hogares, se trata de aparatos antiguos con un gran consumo.

El pico, para enero

«Por ahora hemos notado poco el incremento en el precio de la luz, será a finales de este y a partir de enero cuando más crezcan los recibos por lo que esperamos que la demanda sea todavía mayor», insiste el concejal, que adelanta que la partida presupuestaria para 2022 tendrá en cuenta esta situación. «Tenemos que ser capaces de medir muy bien cuáles van a ser las necesidades», precisa.

El pago de la calefacción se presenta como otro de los principales problemas en muchos hogares zaragozanos. Con recibos al alza, cada vez son más las solicitudes de ayuda que llegan hasta los servicios sociales municipales para pagar las facturas. De las 312 peticiones registradas el año pasado se ha pasado a 508, con un importe de 84.266 euros de inversión, frente a los 53.075 de 2020.

Más de 12.000 familias han pedido una subvención

Más de 12.000 familias (12.276) han recurrido al Ayuntamiento de Zaragoza para solicitar algún tipo de ayuda, la mayoría para poder hacer la compra. Un 26% menos que en 2020, cuando fueron 16.733. Hay que tener en cuenta la excepcionalidad del año pasado, cuando la pandemia del coronavirus azotó la estabilidad económica de muchos hogares. 

Según el informe del área de Acción Social, durante los diez primeros meses del año se han registrado 34.499 solicitudes, de las que se han concedido el 94%.

Cada hogar recibe una media de 2,65 ayudas, aunque hay 1.757 expedientes que superan las cuatro. Representan el 14,31% del total de unidades de convivencia, frente a las 1.516 del año pasado.

Además de las ayudas de alimentación, luz y gas, las solicitudes para el pago del comedor escolar han aumentado en el último curso, hasta alcanzar las 501, frente a las 362 de 2020. El importe medio se sitúa en 273,15 euros, un 19,31% menos que en 2020, que era de 338,52. También han experimentado un crecimiento las subvenciones para hacer frente a la salud bucodental (de 225 a 564 en un año) o para gastos de óptica (de 236 a 438). 

Las ayudas en concepto de alimentación son las que son resueltas en el plazo más breve, aunque se ha reducido en todos los casos. 

Más demanda

Lorén avisa de que la subida generalizada de los precios va a tener sus efectos en las ayudas de urgente necesidad, que aumentarán durante 2022 de forma generalizada. «El aumento de la inflación que se espera el próximo año afectará a los precios del alquiler, que serán más altos, por lo que estimamos que la demanda de ayudas en este concepto será mucho mayor», explica el concejal.

Ya se ha notado y este ejercicio se ha producido un aumento de un 128,97%, pasando de las 2.323 peticiones a las 4.505 en los diez primeros meses. Suponen ya el 13,05% de las ayudas solicitadas y el 25,45% del importe concedido. En este caso, el consistorio abona de media 550,74 euros, un 4,76% menos que en 2020, unos 28 euros menos. Las ayudas de alimentación siguen siendo las más elevadas. Suponen el 70,99% las 34.521 solicitadas este año, y el 56,63% de los 9,1 millones concedidos hasta ahora.

Han disminuido un 29,39% respecto a 2020, cuando se registró un pico importante como consecuencia del covid. El año pasado por estas fechas ya se habían recibido 34.706 solicitudes, y este han sido 24.506. Además, se ha registrado un descenso de las ayudas concedidas del 29,90%.

Inversión

El consistorio presupuestó 15,4 millones euros para ayudas de urgente necesidad tras el incremento experimentado el año pasado, cuando la pandemia agudizó la crisis económica y obligó al ayuntamiento a redoblar los esfuerzos en materia de acción social. En 2020 se destinaron 11,4 millones. El importe medio de las subvenciones se eleva a 282,107 euros, un 11,47% más que en 2020, unos 30 euros.