Decenas de familias acudieron ayer a los puntos habilitados para informar y tramitar acerca de las becas de comedor y material escolar concedidas por el Gobierno de Aragón. Durante todo el día, la afluencia fue notable tanto a la sede del Colegio de Trabajadores Sociales, como a la de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (Fapar) y a los colegios seleccionados.

También abundó la petición de información a través del teléfono. "Hemos atendido, sobre todo, a personas a las que se les ha venido negando la ayuda en años anteriores por cuestiones económicas a pesar de que su situación es precaria, pero, como se valora la renta de hace dos años y no la actual, temen que tampoco esta vez vayan a tener suerte", indicaron desde Fapar, que recibió a medio centenar de solicitantes.

Los trabajadores y colaboradores voluntarios permanecerán en los puntos fijados para la asesoría hasta el próximo día 7, fecha límite establecida por el Departamento de Educación para presentar la solicitud. De momento, la Administración no se ha pronunciado acerca de si estimará o no la petición de familias y trabajadores sociales de ampliar el plazo en diez días más. También el Justicia de Aragón se ha sumado a esta demanda.

Los colectivos sociales, que llevarán a los tribunales la convocatoria de la DGA, reiteraron su llamamiento a las familias para que pidan la beca aunque no cumplan los estrictos requisitos económicos impuestos por Educación --una renta familiar anual inferior al IPREM (algo más de 6.000 euros) para aspirar a una ayuda de comedor--.