Hasta el propio Alfredo Pérez Rubalcaba lo destacó durante su intervención ante los delegados y los militantes del partido: el "ambiente de tranquilidad" se dejaba sentir ayer en el Palacio de Congresos de la Expo. Los socialistas aragoneses acudían a su convención con el pacto totalmente cerrado entre las tres provincias y eso se notó. De hecho, casi ningún delegado esperaba escuchar voces discordantes. "Creo que Lambán ha sabido recoger todas las sensibilidades y estoy seguro de que habrá unanimidad", comentaba Vicente Larred, un militante desde hace casi 30 años que aún recordaba las épocas de consipiraciones y tejemanejes.

Así las cosas, los delegados afrontaban el congreso de manera "relajada" e incluso festiva. "Para mí esto es mejor que ir a la ópera porque llevo toda la vida en el partido y aquí veo a muchos amigos", subrayaba Pilar García poco después de escuchar a Rubalcaba. Según reconocía la militante de 73 años, a veces, estos congresos se parecen mucho a una excursión de fin de curso o a una cena de exalumnos. "Para los que llevamos el veneno del partido en la sangre esto es como una fiesta porque, además, ves a gente que hacía tiempo que no veías", añadía Fran.

A su lado, Concha, militante "desde hace 35 años", destacaba el "buen rollo" de la convención, aunque subrayaba que no siempre había sido así. "Este buen ambiente sería impensable si la candidatura no hubiera sabido unir a todas las partes en un objetivo común", señalaba.

Con todo, en los pasillos del Palacio de Congresos también se escuchó alguna voz crítica. Como la de Carlos, que opinaba que Lambán era "más de lo mismo". "Es una apuesta de continuidad poco valiente que nos alejará más del sentimiento que se palpa en la calle", aseguraba el delegado.

Más allá de para respaldar al ejeano, el congreso también sirvió para subir la moral de los militantes. Las elecciones en Andalucía y Asturias han "recargado las pilas" de los delegados y ahora ven el futuro con otros ojos. "Si los comicios generales fueran ahora el PP no sacaría mayoría absoluta", aseveraba Larred. Por su parte, Concha reconocía que los resultados "nos dan un plus de motivación", pero recordaba que "aún hay mucho trabajo por delante".