El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, anunció ayer que el recurso que presentará su equipo de Gobierno sobre la sentencia que anula el cambio de nombre del Príncipe Felipe se fundamentará en que un informe jurídico establece que el nombramiento inicial, en 1986, de estas instalaciones ya fue «nulo de pleno derecho». Un argumento del equipo jurídico que, admitió, «ignoraba» y le «sorprendió» conocer.