Un centenar de personas se concentraron hoy en la Plaza del Pilar de Zaragoza, donde guardaron cinco minutos de silencio, en repulsa por la muerte ayer en la capital aragonesa de una mujer apuñalada por su marido, primera víctima de la violencia doméstica registrada en Aragón en 2007.

Ascensión S.T., de 64 años, murió ayer por la noche en Zaragoza a manos de su marido, Félix C.M., de 69 años, quien aviso él mismo a la policía de que había apuñalado a su mujer y que, tras prestar declaración, pasa hoy a disposición judicial, informaron a efe fuentes policiales.

La concentración, convocada por el Ayuntamiento de Zaragoza, se celebró a las 12.00 horas ante el Consistorio, donde al alcalde, Juan Alberto Belloch, con el equipo de gobierno municipal PSOE-PAR y representantes del Gobierno de Aragón y de los partidos de la oposición (PP, CHA e IU) sujetaban una gran pancarta con el lema "No a la violencia contra las mujeres".

Tras cinco minutos de silencio, que acabaron con aplausos, Belloch dijo que con esta convocatoria querían expresar el dolor ante un acto en el que no existía ningún antecedente ni denuncias previas, y por lo tanto desde el punto de vista estrictamente policial, atención inmediata o judicial "era algo que no era previsible" y, de esta manera, "difícil de evitar".

En cualquier caso, agregó, la tragedia se ha producido y, aunque "no se sabe la causa concreta de los hechos en este momento, ni siquiera el origen de la depresión que por lo visto sufría la víctima", la más intensa aplicación de las leyes sociales que protegen a las personas mayores o a las que tienen problemas de todo tipo es "una política de fondo que de un modo u otro puede incidir también en disminuir este tipo de actos de violencia".

En este sentido, Belloch opinó que son fundamentales las campañas de sensibilización, como la que el Ayuntamiento va a emprender en unos dos meses por medio de la Casa de la Mujer, siempre en coordinación con el Gobierno de Aragón y el central.

Ya que, a su juicio, en el tipo de actos ocurrido ayer en los que "no hay ningún dato, ni siquiera de los vecinos que la consideraban una pareja ejemplar", sólo se puede atajar por la sensibilización y no sirve el incrementar los medios materiales de protección policial o jurídica porque no se pueden detectar.

Por su parte, la consejera de Servicios Sociales y Familia, Ana Fernández, condenó este acto de violencia contra las mujeres, "un problema de toda la sociedad", y agregó que el Gobierno de Aragón tiene todos los instrumentos necesarios para poder proteger a las mujeres.

Las aragonesas "no deben sentirse solas", dijo Fernández, ya que pueden acudir a al Instituto Aragonés de la Mujer (IAM), donde hay mecanismos como dispositivos de alarma, un teléfono de veinticuatro horas y otra serie de instrumentos que se están empezando a desarrollar en esta legislatura a partir de la nueva ley integral de violencia doméstica aprobada por las Cortes autonómicas hace unos meses.