La comisión bilateral no volverá a reunirse esta legislatura. El Gobierno de Aragón tenía previsto convocar un nuevo encuentro antes de mayo. La decisión evidencia el distanciamiento que se ha producido en las últimas semanas entre PP y PAR. En cuatro años este órgano se ha reunido en otras tantas ocasiones, sin apenas avances.

La comisión bilateral era, de hecho, uno de los instrumentos más reivindicados por el PAR en la articulación de las relaciones entre el Estado y la comunidad autónoma. La pasada semana mismo la presidenta Luisa Fernanda Rudi la ponía como ejemplo a seguir. Y hace pocos días fuentes del Ejecutivo aseguraban que volvería a convocarse. Ahora todo parece haber cambiado. El desinterés del presidente de este órgano, José Ángel Biel, ha derivado en este nuevo rumbo, según explicaron ayer desde el Pignatelli. Unido a los desencuentros entre los socios: el plantón del PAR al PP en la reducción de consejeros comarcales o las diferencias más que evidentes en la gestión de la riada del Ebro han enfriado la relación.

Llegados a este punto y con el llamado pacto de gobernabilidad ya "superado", PP y PAR afrontan la recta final hasta la disolución del Parlamento con la voluntad de salvar el expediente. En las Cortes se seguirá apoyando al Ejecutivo, pero no se producirán más avances. Tampoco en la bilateral, que de esta forma termina una legislatura en la que, por lo menos, se ha reunido. Y eso ya es mucho considerando la experiencia de anteriores etapas, sobre todo la última del PSOE de Marcelino Iglesias. Lo cierto es que este instrumento tuvo más protagonismo en los primeros años del pacto de Gobierno actual, y ha ido perdiendo fuelle, hasta diluirse, y ya ni siquiera convocarse.

La primera reunión se produjo en julio del 2012 en Zaragoza; duró apenas 40 minutos y se saldó con el acuerdo de que se incluyesen las comarcas en la reforma de la ley de régimen local. La siguiente fue en octubre de ese mismo año en Madrid; se acordó invertir 95 millones de euros a través de los Presupuestos Generales del Estado, de los que Aragón había salido bastante descolgada de la media nacional. La última bilateral se celebró en octubre del 2013 en Madrid. No hubo avances significativos, más allá de declaraciones de intenciones.