Las esperadas obras del castillo de Caspe empiezan esta semana. La intención es terminarlas en mayo del año que viene, pues a finales de junio se celebrará el 600 aniversario del Compromiso de Caspe, un hecho histórico que determinó el futuro de Aragón y se desarrolló en la fortaleza medieval.

"Las obras han de estar acabadas ineludiblemente dentro de nueve meses exactos", afirmó ayer Jesús Senante, concejal de Urbanismo de la localidad zaragozana.

De momento ya se ha obra en la bodega, en el llamado salón del Compromiso, que se realizará en un estilo moderno que ya ha provocado agudas críticas, entre ellas la de Apudepa (Acción Pública para la Defensa del Patrimonio Aragonés).

En un comunicado hecho público ayer, esta entidad se refirió a la "desnaturalización del castillo del Compromiso" y atribuyó la responsabilidad a la anterior Dirección General del Patrimonio. Sin embargo, en la Asociación de Amigos del Castillo, ven las cosas de otra manera. "En la restauración se han podido hacer cosas discutibles, pero otras están muy logradas", señaló ayer un miembro de la entidad.

En cualquier caso, en Caspe cunde la opinión de que lo importante, a tan corta distancia del Compromiso, "es que las obras se hagan bien y con celeridad y se llegue a tiempo", según indicaron fuentes municipales.