El arzobispo cardenal de Barcelona, el turolense Juan José Omella, opinó ayer que el conflicto político entre Cataluña y España «quizás ha llegado a la situación actual porque unos no han escuchado a los otros». En su primera entrevista como cardenal, concedida a Radio Estel y Catalunya Cristiana, el nuevo purpurado defendió «las buenas relaciones entre pueblos» y recomendó «hacer un esfuerzo para escuchar al otro, desde un lado y desde el otro».

Respecto al encuentro entre el presidente catalán, Carles Puigdemont, y la vicepresidenta española, Soraya Sáenz de Santamaría, el pasado miércoles en la embajada de España en Roma con motivo de su nombramiento, el prelado revela que «la relación fue normal, simpática, humana y muy buena», aunque reconoció que «no se habló de temas políticos, porque no era el momento».

Omella precisó que él no es un «técnico» de política y que «la Iglesia no entra en las cuestiones políticas». En este sentido, puso el ejemplo de un matrimonio y las relaciones familiares para aclarar que se pueden dar indicaciones siempre que los temas de fondo se resuelvan internamente.

El cardenal, nacido en Cretas, un pueblo fronterizo con Cataluña, puso el ejemplo de Aragón y Cataluña para recordar que «son pueblos muy cercanos que deben evitar tensiones, que todos tenemos que hacer un esfuerzo para conseguir unas buenas relaciones entre los pueblos».