Trabajadores sociales y padres de alumnos de la escuela pública solicitaron ayer al Departamento de Educación del Gobierno de Aragón la ampliación, en diez días más, del plazo habilitado por la Administración --hasta el día 7 de mayo-- para solicitar becas de comedor o para material escolar. Así lo anunciaron ayer Javier Escartín, presidente del Colegio Profesional de Trabajadores Sociales de Aragón, y Nieves Burón, secretaria de la Federación de Asociaciones de Padres de Alumnos (Fapar), que alarmaron contra la "insensibilidad del departamento".

Ambos colectivos recurrirán la convocatoria publicada por la DGA por tercera vez --ya lo hicieron en enero y septiembre del año pasado-- a través de un recurso contencioso administrativo también compartido por la plataforma por la escuela pública.

Trabajadores sociales y padres denunciaron, asimismo, las "trabas en el acceso" a las ayudas, ya que "solo puede hacerse a través de internet y faltan soportes de apoyo para la cumplimentación, en lo que parece indicar un objetivo de disuadir a las familias de que soliciten las becas", indicó Burón. Por ello, ambos colectivos informarán y apoyarán a las familias en la tramitación de las instancias a partir del día 4.

Para ellos, el límite económico impuesto por Educación --el salario mínimo (algo más de 6.000 euros anuales) por unidad familiar para acceder a una beca de comedor y el doble para una ayuda para libros-- es "injusto y excluyente para muchas familias".

En este sentido, Escartín recordó que "uno de cada cuatro niños en Aragón está en riesgo de pobreza" y cargó contra la postura "inmóvil" del departamento que, en su opinión, "da la espalda a las familias aragonesas, especialmente a las más desfavorecidas".

Por su parte, Burón aseguró que "no es un problema de dinero, sino de voluntad" de la DGA, a la que acusó de "dejación brutal de su responsabilidad".