Cinco días antes de lo previsto se presentó Leo Messi en Sant Joan Despí. No hay gesto más sintomático del compromiso de la estrella principal del equipo que adelantar la incorporación al trabajo. La proximidad de la Supercopa de Europa (11 de agosto), la de España (14 y 17 de agosto) han acelerado las ganas de ganar de Messi ante la perspectiva inmediata de conquistar los dos primeros títulos de los seis que hay en juego.

No volvió solo el delantero. Ni sólo él tiene tiene prisa por jugar. Regresó acompañado de Javier Mascherano, que como Messi debía sumarse al grupo el próximo lunes. Ellos fueron los últimos en cerrar la temporada pasada, el pasado 4 de julio, al disputar la final de la Copa América. Jugaron y perdieron ante Chile. Claudio Bravo está citado el lunes. Es el único que falta para que Luis Enrique tenga a todos los componentes de la plantilla. No es descartable que el portero también acorte las vacaciones y vuelva antes.

Ya lo hizo Ter Stegen, su competidor bajo los palos, que había jugado el Europeo sub-21 con Alemania hasta finales de junio. Estaba convocado originariamente para ayer, pero adelantó su vuelta y subió al avión de la gira por Estados Unidos. Le quedaba pendiente la revisión médica y la pasó el día que le tocaba, ayer, conjuntamente con Dani Alves y Neymar. Eran tres los jugadores que esperaban en los servicios médicos, y se encontraron con cinco. Y cuatro fueron los que se entrenaron por la tarde con los preparadores físicos Rafel Pol y Edu Pons. Ter Stegen tuvo fiesta, como todos los participantes de la gira.

"¡Se acabaron las vacaciones! Empezamos a prepararnos para otra temporada llena de desafíos", escribió Messi en su cuenta de Facebook. El mensaje aludía implícitamente a la inminente disputa de dos títulos y la necesidad del astro de adquirir con rapidez la puesta a punto para viajar a Tbilisi con garantías, sumar el primer título y saciar su frustración de la final perdida con Argentina, la segunda consecutiva tras la del Mundial en el 2014.

El día anterior su esposa Antonella Roccuzzo colgó en Instagram unas imágenes de Leo corriendo en una cinta. Neymar, mientras tanto, volaba a Barcelona cerrando sus vacaciones que han discurrido por Brasil, Japón, Las Vegas e Ibiza, según ha ido informando el propio delantero en las redes sociales. Neymar acabó antes de hora la Copa América por su expulsión. Y, como Messi, tratará de resarcirse con la camiseta azulgrana.