Ibon Zugasti, un corredor atípico de 36 años, que hace tan solo tres temporadas que se dedica a la competición, se impuso ayer en la meta de Escucha, punto final de la tercera etapa, cuyo banderazo de salida se dio en Zaragoza. Zugasti estuvo toda la etapa atento a cualquier movimiento buscando la sombra del líder porque sabía que el Comunitat Valenciana iba a trabajar duro para mantener el maillot amarillo. Sabía que si era capaz de mantener su objetivo durante los 155 kilómetros de la etapa, el tiempo perdido que acumulaba en la clasificación general le permitiría moverse con un margen de libertad de cara a optar por un triunfo de etapa.

El desarrollo de los hechos se ajustó a la idea de Zugasti. Sufrió en la primera mitad para estar en los cortes significativos pero finalmente se aposentó entre un selecto pelotón de una veintena de unidades que marchaban tras la escapada del día y cuando se produjo el reagrupamiento, a tan solo seis kilómetros de Escucha, pasó a la ofensiva junto a Hernán, Óscar García, Aranzazu y Esteban Plaza.

La meta no solamente tenía un emplazamiento exigente sino que además culminaba una larga subida de más de tres kilómetros. Zugasti se empleó a fondo y a base de mucha fuerza, una cualidad fisica que este guipuzcoano atesora en grandes cantidades, se deshizo de sus compañeros. El resto de la jornada estuvo marcado por numerosos intentos de escapada, siempre en forma de pequeños grupo, con más intención de generar estrategias de puente para asaltar el maillot de Torrella que con interés por la etapa.

La fuga más consistente se formó llegando a Belchite con ocho integrantes que más tarde se quedaron en cinco. Además de Ferrari (CAI) iban los dos máximos rivales de Torrella: Gutiérrez y Olmo junto a Víctor Martínez y Couto. La ventaja no superó el minuto y medio debido a la enorme labor que hizo el equipo del líder. Una vez pasado el alto de Segura de Baños, Torrella y su equipo se emplearon a fondo hasta alcanzar el objetivo de anular la escapada. El uruguayo del CAI Fabricio Ferrari obtuvo la recompensa de situarse como líder de las metas volantes. Mientras tanto, Torrella aguantó un día más el liderato pero con mayor sacrificio que en la etapa de Huesca.

Zugasti, que además de ganar la etapa se puso líder de la regularidad, aportó las claves de su victoria. "Ha sido una victoria de fuerza. Sabía que existía un desnivel en la meta y aproveché para atacar con desarrollo", dijo el vencedor.