Indignación y decepción en el sector agrario español ante los cambios de última hora planteadas por la Comisión Europea y el Ministerio de Agricultura a la aplicación definitiva de la reforma de la PAC en España. A falta de tres días para la aprobación de los reglamentos que desarrollan la aplicación práctica de la nueva Política Agraria Común (PAC), el ministerio, a instancias de la Comisión Europea, ha introducido una modificación que facilita cobrar las ayudas de la PAC a titulares no activos sin tener un porcentaje mínimo de ingresos de la actividad y por superficie asociada a pastos sin necesidad de un mínimo de animales. Esto, según denunció ayer la Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas (COAG), "abre la puerta a absentistas, grandes propietarios de tierra, incluso cotos de caza, que no tienen actividad agraria real".

COAG, a la que pertenece la aragonesa UAGA, critió que la negociación comunitaria "ha sido un fiasco, una especie de juego de trileros de la Comisión Europa con el sector agrario". En opinión de su secretario general, Miguel Blanco, "estas modificaciones evidencian la falta de voluntad para defender un modelo agrario de futuro y acabar con ese reparto injusto e indiscriminado de las ayudas de la PAC en España, donde hay casi 900.000 perceptores frente a 400.000 agricultores y ganaderos profesionales".