El presidente de las Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, José Víctor Nogués, reclamó ayer la necesidad de abandonar los localismos con el objetivo de reforzar las economías de escala de un sector que se ha convertido en uno de los grandes motores de la economía aragonesa. «Lo de que mi pueblo y mi fruta es la mejor tiene que cambiar porque el mercado internacional va a valorar que seamos empresas serias y con trazabilidad. Eso lo podemos hacer las cooperativas si nos unimos, sobre todo, por sectores», subrayó Nogués tras participar en la asamblea general de la Federación de Cooperativas Agroalimentarias de Aragón, celebrada ayer en Zaragoza.

Por ello, instó a estas entidades a «permanecer unidas» para llegar a los mercados globales. Los contratos a medio y largo plazo, dijo, se basan en que «haya infraestructura detrás y que sean capaces de suministrar lo que piden los mercados, para lo que es necesaria la unidad por sectores».

La Federación, que suma a 160 cooperativas, más de 1.700 millones de facturación, 10.500 empleos directos e indirectos y 50.000 socios, atraviesa un momento dulce debido al impulso del sector agroalimentario en la comunidad. Además, las previsiones de cosecha en esta campaña son «muy buenas», principalmente en las provincias de Zaragoza y Huesca, subrayó Nogués.

No obstante, Nogués se mostró preocupado por los efectos de la nueva Política Agraria Común (PAC) y por la incorporación de jóvenes y mujeres a los puestos directivos de estas entidades.

Desde la perspectiva del negocio, el presidente de la Federación de Cooperativas Agroalimentarias, destacó que están «pendientes de las crisis internacionales», de las que dependen los precios de los cereales, al tiempo que urgió a realizar «inversiones a medio y largo plazo que sean rentables en las explotaciones» ya que las cooperativas, como empresas, tienen que estar «en continuo crecimiento».

Sobre el cambio de gobierno en España, Nogué apuntó que algunas cooperativas tienen «más de cien años y algunas han estado por encima de los gobiernos», por lo que les tocará «trabajar con las circunstancias que haya».