Jesús Sáiz se toma su tiempo para dibujar el Capitán América a una lectora que acaba de comprar un tebeo en el estand de la librería Taj Mahal. Cuida los detalles que puede mientras ella le comenta algo sobre su obra. No muy lejos de allí, enfrente, el estand de Malavida recoge un goteo constante de chavales (y no tan chavales) que se interesan por sus últimas novedades y, en el otro pasillo, David Terrer firma ejemplares en GP Ediciones mientras en Milcomics, el revoloteo de gente es constante.

Ha llegado diciembre, con él, el Salón del Cómic de Zaragoza y la sala Multiusos del Auditorio ha abierto sus puertas a dibujantes y lectores que viven un encuentro muy especial. Y es que si algo quedó claro durante la gala de los premios celebrada el jueves es que el del dibujante es un oficio muy solitario en el que dibujas «a ciegas sin conocer a los lectores que lo van a ver», tal y como dijo el propio Jesús Sáiz al recoger el premio a Mejor dibujo aragonés. Y es ahí donde radica la importancia de una cita como la de Zaragoza (especialmente cercana con la gente) en la que los autores se funden con su público. La fila para que Alfonso Casas firmara un ejemplar no era muy grande pero sí constante y lo mismo se podría decir de la de Antonio Altarriba y Keko... aunque para los que se quedaban con la curiosidad de ver qué estaban dibujando, se colocó una cámara encima de ellos que iba emitiendo a tiempo real en una pantalla situada en el mismo estand de firmas.

MANGA Y SEXO / A un lado, la sala Filemón aborda la situación del manga en el cómic español mientras que el otro flanco del estand de firmas, en el espacio Mortadelo, Chema Cebolla, Mamen Moreu, Ramón Bodú y Artur Laperla dialogan en una divertida y entretenida charla sobre el sexo en el cómic ayer y hoy. Todo ha cambiado mucho es una de las conclusiones que se puede sacar de esta animada conversación con espacio para las experiencias personales. Tampoco nada es igual en el cómic en general. Basta con darse un paseo por el Salón y enseguida se distingue a los coleccionistas que buscan ejemplares cuanto más antiguos mejor de tebeos míticos como el Capitán Trueno, el propio Spider-Man o algunos superhéroes de los lectores habituales del cómic actual e incluso de los ocasionales.

Los primeros miran, rebuscan, ojean y solo les falta sacar la lupa para tomar una decisión mientras que el resto parece plantearse una jornada del viernes más tranquila ya que todavía queda mucho fin de semana por delante. Sin embargo, coinciden casi todos los profesionales de la cita, para ser viernes, el Salón presenta un aspecto muy animado. No faltan los disfraces entre los más jóvenes ni la animación que le da el manga e incluso las aglomeraciones que ya se empiezan a sufrir sobre todo en la zona del fondo de la Multiusos, junto a la cafetería y la exposición de cosplay montada este año para la ocasión.

¿Y los más pequeños? También tienen su hueco en la sala Multiusos ya que a la tradicional pecera con tebeos con los que poder introducirse en el mudno del tebeo, hoy toca sesión de cuentacuentos en un espacio a rebosar con los niños sentados por el suelo.

En la sala Filemón, el manga deja espacio a Albert Monteys y Pep Brocal que hablan sobre tebeos del espacio exterior acompañados por el dibujante David López.

En Taj Mahal, Jesús Sáiz sigue dibujando a su Capitán América mientras enfrente, en el estand de la Fnac, se incorpora Álvaro Ortiz para firmar sus tebeos. En Malavida, no hay descanso mientras la primera jornada enfila su recta final. Esto acaba de empezar y ya huele a un nuevo éxito de público aunque la jornada grande será hoy por la tarde y mañana por la mañana. En el camino hasta llegar al cierra muchos talleres, conferencias, firmas, dibujos y, sobre todo, ganas de pasarlo bien y oportunidades (muchas) para el encuentro.