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La carpa es diferente, cebrada a rayas blancas y negras. En el interior, sobre la pista, unos tubos dorados se colocan a modo de juncos que emergen de un agua verdosa. Del techo cuelga una gran máscara, una especie de luna de cartón piedra con rostro humano sobre la que se proyectan imágenes. Y de fondo, música tribal y sonidos que evocan la selva tropical.
Así da la bienvenida al público Vida, el nuevo espectáculo que Il Circo Italiano estrena en Zaragoza en plenas fiestas del Pilar y que puede verse en el recinto ferial de Valdespartera hasta el próximo domingo 23 de octubre.
Vida pretende ser un homenaje a la belleza de la naturaleza, un viaje por la creación con números que representan desde el origen del universo hasta las primeras tribus, pasando por la formación de los planetas o los animales de la sabana africana.
Una treintena de artistas, entre acróbatas, funambulistas, malabaristas, trapecistas e ilusionistas, convertidos en serpientes, pájaros, cebras, tigres, leopardos o lagartos, animan al público a dejar volar la imaginación con sus habilidades, un cuidado vestuario y una potente escenografía. Todo ello acompañado, además, del humor de los populares payasos Paute y Capitano, que con su desvergonzado y sorprendente comportamiento, acompañan al espectador a lo largo de toda la función.
Más difícil todavía
Un camaleón es el primero en salir a la pista para reclamar la atención de los espectadores. Tras él llegan unos peces que bailan hasta quedar atrapados en una red que les levanta por los aires y de la que finalmente logran zafarse. Lo mismo les sucede a tres gráciles pájaros que vuelan para escapar de la amenaza de una fornida serpiente y a una pequeña cebra que cae en las garras de unos sigilosos leopardos.
Llega el turno de los malabares. Una especie de dama del Nilo se sube a un monociclo colocando platos y tazas, unos sobre los otros, sin ayuda de las manos. A continuación, le toca el turno a las acrobacias y danzas de un grupo de africanos que forman en el aire espectaculares figuras. Y justo antes del descanso, unas peculiares mariposas toman la pista danzando y batiendo sus alas con un curioso juego de música y luces.
El segundo bloque comienza con una danza derviche con la que se recrea el Big Ban y la formación de los planetas. A continuación, el espectáculo de láser de un indio americano deja boquiabierto al público. Las mayores ovaciones las levanta el mago escapista que, tras hacer volar una mesa, se encadena las manos para subirse a lo más alto de la carpa metido de una caja de donde desaparece para reaparecer, un minuto más tarde. Una trapecista y el número de mano a mano de los hermanos Marton ponen el broche al espéctaculo con todos los artistas sobre la pista recibiendo el caluroso y merecido aplauso del público.
Il Circo Italiano permanece en la ciudad hasta el próximo 23 de octubre (excepto los días 18 y 19) con doble función a las 17.30 y 20.15 horas. Las entradas pueden adquirirse en las taquillas del circo, en el punto de venta del centro comercial El Caracol o a través de la web www.ilcircoitaliano.com. Además, el lunes 17 habrá 2x1 y el domingo 23, precios populares, con entradas que oscilan entre los 10 y los 15 euros. H
