El Instituto Aragonés del Agua ha editado un folleto con recomendaciones para ahorrar agua, tanto por parte de los ciudadanos como de los ayuntamientos. Para esta nueva iniciativa de educación ambiental, se han editado 62.000 ejemplares, que se están distribuyendo en centros oficiales, ayuntamientos, comarcas, bibliotecas y otros lugares públicos de Aragón.

Esta acción se enmarca en la campaña "Ríos de calidad", y se ha puesto en marcha coincidiendo con el Día Mundial del Agua, motivo por el cual, también se celebran actos durante este fin de semana en el Aula de Medio Ambiente Urbano y en el Centro Internacional del Agua y el Medio Ambiente (CIAMA-La Alfranca) del Gobierno de Aragón.

Entre los muchos consejos del folleto, se recomienda poner los electrodomésticos, como la lavadora y el lavavajillas, siempre llenos. Utilizar la temperatura oportuna al caso (cuanto menor, mejor) y siempre con la dosis mínima imprescindible de detergente. En el cepillado de dientes, usar un vaso de agua en lugar de dejar correr el agua. Ducharse en vez de bañarse permite consumir hasta cinco veces menos agua. Con cinco minutos de ducha puede bastar. Y al enjabonarse, cerrar el grifo. Si se friegan los platos a mano, dejar el grifo cerrado todo el rato posible: se puede usar una pila o barreño para enjabonar y otra para aclarar. Además, es importante no usar el retrete como papelera.

La limpieza de calzadas, aceras, patios o suelos de garaje es mejor hacerla siempre que se pueda con escoba y badil, en vez de con una manguera y agua. En cuanto a reutilización en el hogar, el agua de lavar la fruta y la verdura, por ejemplo, se puede usar después para regar las macetas. Asimismo, fregando primero las zonas menos sucias de la casa permite después limpiar las más sucias.

Lavar el coche en un túnel de lavado puede ahorrar casi 300 litros de agua respecto a hacerlo con manguera. Si tiene jardín, se recomienda plantar especies que requieran poca agua y que resistan bien la sequía (como las especies esteparias, que suelen ser aromáticas) e instalar desde el principio un sistema de riego por goteo. También es preciso evitar regar en horas calurosas y en días de viento.

Dispositivos ahorradores

Existen dispositivos que permiten ahorrar mucho agua, tales como los perlizadores, pequeños dispositivo sque se incorporan a los grifos y mezcla el agua con aire, proporcionando la misma sensación con un caudal de agua menor, de hasta un 40 por ciento. Los limitadores de carga y de llenado se adaptan a cualquier cisterna baja y permiten reconvertir en ahorrador un inodoro normal, al sustituir el mecanismo original por otro que limita el volumen de agua de la descarga o que impide que la cisterna se llene hasta el total de su capacidad.

También hay reductores de caudal, interruptores para duchas, grifos con regulador, grifos con sensores de infrarrojos, etcétera. Una buena práctica es fijarse siempre en las características el producto antes de comprarlo. El Departamento de Medio Ambiente ha editado diversos materiales de información sobre estos aspectos, que pueden consultarse en www.aragon.es. En todo caso, debe evitarse el goteo: Una gota perdida por segundo son 30 litros al día. Diez gotas por minuto suponen 2.000 litros de agua al año.

El Instituto Aragonés del Agua también recomienda a los ayuntamientos que reduzcan el riego en los jardines públicos a lo mínimo imprescindible, y hacerlo al amanecer o al anochecer, evitando las horas más calurosas y los días de mucho viento. Cuando sea posible, se utilizarán técnicas de riego por goteo, riego exudante y micro-aspersión. Vigilar el correcto funcionamiento de aspersores y difusores en parques y jardines, y plantar árboles, arbustos y plantas autóctonas, adaptadas a las características climáticas del lugar y con menores exigencias hídricas, son otras recomendaciones.

En las piscinas, detectar y reparar antes del llenado las posibles pérdidas o fugas de agua en el vaso, y en las conducciones de llenado y vaciado; subir el fondo de piscinas a profundidades de no más de 1.80 o 2.20 metros. También aconsejan el fomento de la instalación de contadores de agua en los domicilios, sustituir contadores viejos o defectuosos por otros nuevos capaces de medir consumos permanentes muy bajos asociados a fugas; hacer un seguimiento del agua no contabilizada para localizar pérdidas y revisar el estado de arquetas y depósitos.