La aplicación de la interconsulta virtual, que busca la comunicación entre los médicos de Atención Primaria y los especialistas en un intento de aumentar la eficiencia del sistema público de salud, no convence a parte de los médicos. Consideran que la medida solo persigue reducir las listas de espera y denuncian que la excesiva presión asistencial en primaria dificulta la aplicación generalizada del proceso. Como casi siempre, el diálogo deberá de prevalecer en la búsqueda de la fórmula más beneficiosa para el paciente y en la repercusión de la calidad de los servicios que se prestan. En principio, si la comunicación entre médico de cabecera y especialista reduce las visitas innecesarias, mejora el sistema.