El director de Salud Pública de Castilla y León, Agustín Álvarez Nogal, confirmó ayer que se han detectado cinco casos de ceguera en el hospital Río Hortega de Valladolid tras administrarles perfluorooctano, una sustancia que se emplea en las operaciones de retina.

En una rueda de prensa previa a una reunión de trabajo con técnicos del Servicio Territorial de Sanidad para analizar aspectos competenciales de su departamento en la provincia salmantina, Álvarez Nogal confirmó que cinco personas, a las que se les había aplicado perfluorooctano para ser operadas de retina en el Río Hortega, han perdido la visión. También recordó que a finales de junio pasado la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) emitió una alerta porque la empresa productora de perfluorooctano le dice que había asociado 20 casos de "pérdida de visión a pacientes operados".

Es en esa fecha, relató Álvarez Nogal, cuando se procedió a la retirada del producto de todos los hospitales y la AEMPS empieza a trabajar con la puesta en marcha de los protocolos que se desarrollan en este tipo de circunstancias. Esos trabajos dan como resultado que cinco personas podrían estar afectadas en Valladolid y ahora de lo que se trata es de que las investigaciones terminen para adoptar las medidas que correspondan.

Aunque aún no hay conclusiones, la "opinión personal" del director general es que "todo apunta" a que el producto es la causa de la ceguera, pero "hay que demostrarlo".

Tras tildar de "lamentable accidente" que otras cinco personas hayan perdido la visión definitiva de un ojo, Álvarez Nogal aseguró que el producto en cuestión se venía utilizando desde hace varios años y sin causar incidente alguno, de lo que se está deduciendo que "un lote estuviera en malas condiciones".

También, el Servicio Vasco de Salud ha abierto una investigación después de que al menos 13 personas en el País Vasco hayan denunciado que se han quedado ciegas de un ojo tras ser operadas en el hospital Donostia de San Sebastián, el pasado mes de junio. El perfluorooctano lo utilizan los oftalmólogos en quirófano para aplanar la retina y poder operar el desprendimiento. Después se eliminó del uso quirúrgico, y hasta hace unos meses no se habían registrado problemas. Su uso estaba muy extendido porque resulta muy útil para el especialista en este tipo de intervenciones.

Ya hay al menos 40 casos de personas afectadas en el territorio nacional por el uso del perfluorooctano.