En el año 2014 murieron en las carreteras de la Unión Europea un total de 25.700 personas --5.700 menos que en el 2010--, a razón de casi 70 por día. Una cifra que confirma la existencia de un frenazo en el descenso de las muertes en accidente de tráfico, que apenas lograron retroceder el 1% respecto al 2013 frente a la tendencia positiva de años anteriores, con caídas del orden del 8%. "El 2014 ha sido un año decepcionante en términos de una mejora de la seguridad en las carreteras europeas", lamentó la comisaria de Transportes, Violeta Bulc, que considera los datos "una llamada de atención" ante el aún lejano objetivo de situar el número de muertos por debajo de los 15.700 para el 2020.

Las cifras figuran en un informe anual presentado ayer por la Comisión Europea que sitúa a España como el quinto país de la UE con una menor tasa de mortalidad en accidentes de tráfico, 36 víctimas por millón de habitantes --la misma cifra que en el 2013 aunque con una caída del 32% respecto al 2010--, frente a la media europea de 50,5. La estadística esconde diferencias notables. Por ejemplo, todavía mejores resultados que España obtienen países como Malta (26) y Holanda, Suecia y el Reino Unido, los tres con 28.

Las peores cifras corresponden a Lituania (105), Rumanía (91), Bulgaria (90) y Letonia (90), con tasas que triplican las de los mejores alumnos europeos en este terreno. Esto demuestra, a juicio de Bulc, que es preciso intercambiar buenas prácticas e innovar en métodos y estrategias. "La seguridad viaria requiere esfuerzos constantes. Necesitamos acelerar los trabajos", insistió.

El informe confirma que el 38% de las muertes en accidente de tráfico se produjeron en áreas urbanas; que solo el 8% tuvieron lugar en las grandes autopistas; que el 76% de los fallecidos fueron hombres, y que julio y agosto suelen ser los dos meses negros en las carreteras europeas debido al alto volumen de movimientos.

La estadística también muestra que se redujeron el número de fatalidades entre los jóvenes (el 17% de los muertos tenían entre 15 y 24 años) pero aumentaron entre los mayores de 65, que suponen ya el 25%.

En cuanto a los peatones, otro de los grupos de riesgo, el informe sitúa a España en la media de la UE, con el 22% de fallecidos en este grupo. Los ciclistas supusieron el 4%, la mitad que la media europea y lejos de las cifras de países como Holanda (casi el 25%), en donde sí se produce un gran uso de la bicicleta como medio de transporte.