Leonor Guardiola, de 80 años, confiesa que no había tocado un ordenador hasta que su nieto le regaló uno para que superase la muerte de su marido. Seis años después, no puede vivir sin contactar diariamente con sus amigos virtuales, de diferentes países, y sin actualizar su blog. "Para mí internet lo ha supuesto todo", afirma. Con gente como ella, la brecha digital entre generaciones --entendida como la diferencia por edad de la utilización de las nuevas tecnologías-- se va estrechando.

El último informe de Telefónica concluye que el sector de 45 a 64 años es el que más ayudó al avance de la sociedad de la información en el 2010, con tasas de incorporación superiores a la media. Ello palía la soledad que algunos padecen y les mantiene intelectualmente activos.

AMIGOS VIRTUALES Leonor prefiere a sus amigos virtuales que a sus vecinos del barrio barcelonés en el que reside. Poder conectarse cada día le "ha dado la vida", relata, puesto que al morir su marido se quedó "sin ganas de hacer nada". Leonor Guardiola era tejedora de profesión. Ahora está vinculada a su antiguo oficio dando clases de tapiz y colgando sus diseños y los de sus alumnas en el blog llamado A mi aire, el blog de Merana. Su afición no es comprendida. "Muchos se piensan que lo que hago es buscar pareja", confiesa.

María Amelia Sánchez Sotillo creó su blog A mis 95 años, que fue toda una revolución, alcanzó dos millones de visitas, y recibió premios y felicitaciones incluso de José Luis Rodríguez Zapatero. La anciana gallega tuvo la obsesión en los años en los que mantuvo su blog (murió a los 97) de que la ayuda de internet para "vencer la soledad fuera imitado por otros mayores y apoyado desde las instituciones, tanto incentivando el acercamiento a la tecnología a los mayores como llevando internet a zonas de sin acceso", según Viejo pescador (no quiere descubrir su identidad), alias del administrador de la web Blogueros mayores, que creó este espacio para apoyar la idea de Sánchez.

INFORMACIÓN Este sitio recoge también Zona Senior, un diario digital capitaneado por Andrés Cea, un madrileño, de 61 años que recoge noticias que puedan interesar a un colectivo que la sociedad coloca en el "pelotón de los torpes". Cea añade su opinión a las noticias. Él pertenece al colectivo que aprendió a manejar las tecnologías en su vida profesional, y las usan sin problemas. "No piso un banco. El 98% de transacciones bancarias las hago por internet", dice.

Pero este perfil no es el mayoritario. La brecha digital se estrecha y está condenada a desaparecer con el relevo generacional. La preocupación actual, señala el experto en sociedad de la información José Manuel Robles, no tiene tanto que ver con la incorporación a la red, sino con la "diferencia de usos" que hacen jóvenes y adultos. Los mayores todavía no sacan el partido que ofrece la red para relacionarse con la Administración y hacer la compra sin desplazarse, por ejemplo. La mayoría se conforma con buscar información y comunicarse.