El Gobierno aragonés comenzará en las próximas semanas las obras de adecuación en dos tramos de la carretera A-131, de Huesca a Fraga a través de la comarca de Monegros, en las que se invertirá 6,9 millones de euros. Así lo explicó ayer el director del Servicio Provincial de Obras Públicas del Ejecutivo autónomo en Huesca, Gabriel Claver, que se refirió a la carretera sobre la que se actuará a lo largo de los próximos meses como "uno de los ejes estructurantes del territorio".

Claver informó que en los próximos días comenzarán los trabajos de adecuación de un tramo de 9,5 kilómetros centrado en torno a la localidad de Albero Bajo, que cuenta con un presupuesto de 3,2 millones de euros y un plazo de ejecución de 14 meses. El segundo tramo, un recorrido de unos 8 kilómetros que se prolongará hasta el municipio de Grañén, se adjudicó recientemente en 3,7 millones y un plazo de ejecución similar de 14 meses.

El responsable técnico dijo, asimismo, de las adjudicaciones recientes de obras de acondicionamiento en la carretera A-1239 (Binéfar-Esplús) por 2,3 millones, y del proyecto de construcción de una rotonda en Binéfar de conexión con la A-140, de Pomar de Cinca a Tárrega.

Comentó, además, que en próximas fechas concluirán los trabajos de acondicionamiento de las vías de acceso a la autovía Huesca-Zaragoza desde las localidades altoaragonesas de Gurrea de Gállego y Tardienta.

El responsable provincial de carreteras en Huesca se refirió, por otra parte, a la reciente transferencia al Gobierno aragonés desde la Diputación Provincial de Huesca de tres vías locales que pasarán a formar parte de la red autonómica con las referencias A-2202 (Barbastro-Hoz), A-2611 (Bielsa-Parador de Pineta) y A-2617 (Benasque-Ampriu).

La nueva carretera autonómica que enlazará Benasque con el Ampriu a través de un recorrido de 11 kilómetros será inaugurada hoy sábado por el presidente del Gobierno aragonés, Marcelino Iglesias.