La nueva secretaria de Estado de Educación y Formación Profesional, Eva Almunia, aseguró hoy, tras conocer su nombramiento por el Consejo de Ministros, que asume con ilusión un "nuevo reto" en un Ministerio que gestiona derechos básicos para los ciudadanos.

La hasta ahora consejera de Educación y Cultura del Ejecutivo aragonés, que recibió la noticia de su nombramiento a última hora de la tarde de ayer, se reunió hoy con el presidente del Gobierno de Aragón, Marcelino Iglesias, para comunicarle oficialmente su nuevo destino, que asume, dijo, "contenta".

Ambos esperaron a que el nombramiento se hiciera oficial y a que la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega compareciera en rueda de prensa, para informar del primer Consejo de Ministros del nuevo gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y los nuevos nombramientos.

Eva Almunia, visiblemente nerviosa y emocionada, explicó en la sede del gobierno aragonés que ya ha trabajado en otros ámbitos con la ministra de Educación, Mercedes Cabrera, en su calidad de secretaria federal de Educación en el PSOE, y la relación es "fluida" y hay en ella "mucha lealtad".

Por eso, para ella continuar trabajando a su lado es "un honor", y más en un Ministerio, el de Educación, Política Social y Deporte, que es nuevo y que, reconoció, puede "sorprender" desde el punto de vista de la gestión pero que está "muy próximo" al ciudadano y afecta directamente a las familias.

Eva Almunia apostó por los acuerdos y el diálogo, que es algo que, según dijo, ha intentado potenciar desde la Consejería de Educación y Cultura.

Además, y aunque el ámbito de cooperación es distinto en el Ministerio que en la Comunidad Autónoma, aseguró que desde la Secretaría de Estado va a potenciar la "cooperación" y "colaboración" con las autonomías.

Hizo hincapié en la importancia que se va a dar esta legislatura a la Formación Profesional, de la que también se encargará, y en la relación de estos estudios con el mundo de la empresa.

En el plano personal, reconoció, es "simplemente un cambio de trabajo" o de "ubicación", aunque también "de vida", porque de momento su familia y su casa seguirán en Aragón, algo a lo que dijo que espera acostumbrarse pronto, al tiempo que reconoció que echará de menos su escaño en el Parlamento aragonés.

Preguntada por si ha hablado con Iglesias acerca de quién podría sustituirla, Almunia manifestó que un Gobierno lo conforma su presidente y es él quien "tiene la decisión en sus manos".

El consejero de Presidencia, Javier Velasco, acompañó a Almunia en su comparecencia ante los medios y explicó que hasta que no se cierre todo el organigrama del Gobierno central no se tomará en el Ejecutivo aragonés ninguna decisión con respecto al sustituto de la hasta ahora consejera, en previsión de que algún otro miembro del gabinete pudiera asumir también responsabilidades en el Gobierno de España.

Será entonces cuando Iglesias tomará una decisión, que podría darse a finales de esta semana.