Quien tenga alguna asociación recreativa, social, deportiva o cultural y reciba alguna inyección económica del Gobierno de Aragón, que se vaya mentalizando de que esta se reducirá el año que viene a la mínima expresión. De hecho, el capítulo destinado a subvenciones será el que sufra ajustes más severos. Y tiene su lógica desde la perspectiva del gobierno: si el presupuesto global se recorta un 8%, se mantiene el gasto social y no se puede recortar más el salario de los más de 40.000 trabajadores que prestan servicios a los ciudadanos, otras partidas deberán sufrir recortes más duros. De hecho, el gasto de personal es el apartado más cuantioso de los presupuestos, y ese ya no se puede tocar de momento tras los duros recortes de este año. Por tanto, habrá partidas que --para compensar-- tendrán que sufrir tijeretazos mucho más elevados que ese 8% de media global en que se verá afectado el presupuesto.
