La Asociación Derecho a Morir Dignamente mostró ayer su "estupor" por el llamamiento de la Conferencia Episcopal a no acatar la ley de Muerte Digna. La asociación ha emitido un comunicado en el que califica de "inaudita, cruel e inaceptable" la posición del episcopado y rechaza que lo que autoriza la ley sea "eutanasia activa". Asimismo, califica de "integrista" la postura oficial de los obispos españoles.

Para esta entidad, "al atacar el proyecto presentado por el Gobierno central, cuyo contenido ya había sido rebajado al máximo, la jerarquía católica se pronuncia de facto a favor del encarnizamiento terapéutico, aspira a privar a los enfermos de sus derechos más elementales y les condena a una agonía lenta, dolorosa y absurda, en contra de la praxis médica moderna y del propio sentido común. Se trata de una actitud inaudita, cargada de crueldad y totalmente inaceptable".

Desde Derecho a Morir Dignamente recuerdan que Aragón ya dispone de una Ley de Muerte Digna que ofrece los medios para que quien lo desee pueda disponer de su propia persona sin que sea una imposición y siempre que no haya curación.