No hubo sorpresas. El Partido Popular y el Partido Aragonés se hicieron con buena parte de mapa comarcal, que no se tiñe sin embargo de azul, sino con los colores del PAR, sin duda el gran vencedor del proceso de negociación. La formación liderada por José Ángel Biel no solo presidirá consejos comarcales con el PP, también lo hará con el PSOE. El reto para esta legislatura será reducir el gasto. Una tarea en la que se implicará incluso el Ejecutivo autonómico. También se deberá abordar si estas instituciones reciben el segundo bloque de competencias, que ya congeló el Gobierno de Marcelino Iglesias.

Tras el proceso de negociación entre todas las fuerzas políticas, el PAR ha sido el partido que más réditos ha logrado. Ha conseguido la presidencia en 14 consejos comarcales, mientras que el PP se ha quedado con ocho y el PSOE con 10.

Los partidos políticos habían dejado libertad a sus consejeros para que pactasen con quien se encontrasen más cómodos. Pero ha habido algunas excepciones, sobre todo en Teruel, donde el PSOE y el PAR se han entendido más y mejor que con el PP. En Zaragoza, en cambio, los populares han cerrado acuerdos en la mayoría de comarcas, cediendo en la mayor parte de ellas la presidencia al PAR, puesto que los aragonesistas habían hecho lo propio en los municipios.

Con las comarcas constituidas, estas instituciones emprenden una legislatura que será fundamental para su configuración. La presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, ya ha anunciado que todas deberán acogerse a un techo de gasto que vendrá marcado por el Ejecutivo y que además todo lo que tenga que ver con la contratación de personal habrá de tener el visto bueno de la DGA. Estas instituciones, además, deberán circunscribir su ámbito de actividad a las competencias que les son propias.

Porque este es otro de los asuntos todavía pendientes. Las comarcas asumieron el primer bloque de competencias a diferentes ritmos, pero ahora todas las tienen ya en funcionamiento. El anterior Ejecutivo, desde la consejería de Política Territorial, que controlaba el PAR, prepara los estudios previos para traspasar el segundo bloque, pero finalmente se decidió no hacerlo. El motivo fundamental fue la falta de financiación. Ahora la situación no ha cambiado, así que difícilmente el nuevo titular del departamento, Antonio Suárez, se embarcará en la aventura. Sobre todo porque Rudi es más partidaria de lo contrario, de que la diputación general reabsorba algunos de los servicios que ahora prestan las comarcas. Un punto sobre el que difícilmente encontrará un acuerdo con su socio, el PAR.