Los indignados que el pasado 7 de julio salieron de Zaragoza llegaron ayer a Madrid para formar parte de una asamblea multitudinaria que se celebró a las 21.00 horas en la Puerta del Sol.

Desde que vieron la luz el pasado 15 de marzo, los movimientos se han caracterizado por aglutinar la irritación y el malestar de gentes de todas las edades pero con una característica común, procedían de grandes ciudades. Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, importantes núcleos urbanos que convocaron a miles de personas en sus plazas, bajo un grito común: Intentar cambiar las cosas en un sistema --que a su entender-- no funcionaba. "Vivimos en una sociedad urbanita donde se ha unido la indignación, pero no se conocía la idiosincracia ni los problemas de la gente que vive en los municipios más pequeños", explica César, uno de los cuatro participantes que salieron desde la capital aragonesa.

Este ha sido el principal objetivo de las siete columnas que han recorrido todo el país de norte a sur. "A lo largo de todas las localidades que hemos recorrido siempre empezábamos las asambleas explicando el movmiento, por qué surgía y diciéndoles que queríamos conocer sus problemas", comenta César. La sanidad, la educación, la falta de recursos y los problemas de la despoblación son los principales caballos de batalla de localidades como El Frasno, Ariza o Ateca por las que ha pasado la marcha organizada en Zaragoza.

"En estos pueblos no tienen el problema del paro porque viven del autoconsumo, pero si te encuentras que, por ejemplo, los padres de Sigüenza llevan reclamando un centro lúdico durante años, y que incluso ellos mismos se ofrecen a gestionarlo mientras el ayuntamiento pasa de ellos, incluso teniendo locales vacíos", reclama César. A pesar de que los colectivos nacidos antes y después del 15-M no pueden resolver problemas prácticos de estas localidades, "hemos logrado que cambien el chip y además de solicitar las cosas, luchen por lograrlas, queremos despetar el gusanillo de la reivindicación en la gente".

A los zaragozanos que han protagonizado la marcha se unió gente incluso de Francia y, ayer, participaron en la reivindicación en Madrid .

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