El 1 de junio se activó el operativo de máximo riesgo de incendios forestales, que se prolongará hasta el 15 de septiembre, y que este año cuenta con la novedad de dos pequeños helicópteros que permiten transmitir información sobre los fuegos y la posición de las cuadrillas para mejorar la coordinación. Unas 2.000 personas se encuentran trabajando en las 62 cuadrillas terrestres, 46 autobombas, 80 puestos de vigilancia y ocho helicópteros. El equipo se completa con 55 técnicos de Medio Ambiente, unos 400 APNs y 20 conductores.