Miles de personas se congregaron ayer en Graus para participar en su tradicional Día de la Longaniza, donde se repartieron unas 10.000 raciones de este embutido, después de la tradicional parrillada. La jornada lúdica, que atrae cada año a un buen número de visitantes y turistas, se completó con un mercado de época.

El Día de la Longaniza comenzó a celebrarse hace 20 años a iniciativa de tres de las empresas cárnicas de la localidad, Melsa, Aventín y Maella. Desde entonces, cada último fin de semana de julio, se celebra esta jornada festiva que, el pasado año, atrajo a más de 8.000 personas.

En esta ocasión, con motivo de las dos décadas de historia de la jornada, los organizadores han incluido novedades en la programación como el nombramiento del tastador oficial de la Longaniza de Graus o la creación de exposiciones con utensilios antiguos o imágenes de los veinte años de la fiesta de la Longaniza. Esta edición cuenta además con la colaboración de la denominación de vino del Somontano.