La rotura de un dique en Castejón alteró las previsiones del caudal

La rotura de una mota en la estación de medición de Castejón provocó que las previsiones de caudal no fueran exactas y circulara más agua de la estimada a su paso por Aragón durante la avenida extraordinaria. Esta situación se está reproduciendo de nuevo aunque, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) ya ha incluído en sus mediciones el volumen porcentual del agua que no contabiliza la estación de control.

Esta es una de las primeras conclusiones del estudio realizado por la Confederación para determinar por qué el río alcanzó niveles superiores en Aragón que en Castejón. La rotura del dique de contención en una zona previa al medidor provocó un "efecto de bypass", es decir, que el agua se expandiera en los alrededores y volviera a su cauce original aguas abajo de Castejón. Este volumen que se perdió no lo contabilizaron los medidores por lo que, al margen de error habitual del 10% propio de los contadores, habría que haber sumado "en torno al 15% del caudal medio". Un porcentaje que sí están contabilizando ahora.

MEDICIONES

Este es solo uno de los factores que explicaría por qué por en Boquiñeni el Ebro superó los 7,4 metros de altura previstos por la CHE hasta llegar a 8,20. Asimismo, según explicaron desde la confederación, la laminación que se produce durante una avenida extraordinaria entre Castejón y Zaragoza es menor que la que se genera en una crecida ordinaria. También afectó la sobreelevación de algún punto o las variaciones del propio cauce.

Tan solo 26 días después de que el río llegara a estos extremos, la historia se repite en los municipios ribereños. Los campos de cultivo, todavía sin secar y cubiertos de más de un metro de grava, vuelven a estar bajo el agua.

Esta vez los cascos urbanos se salvaron y el río ni se asomó por las calles. No obstante, había equipos de Sarga y de los Bomberos para achicar agua en caso de que fuera necesario actuar. La cresta pasó por Novillas al mediodía con una altura de 5,84 metros --1,55 menos que en la anterior--. A las 21.00 horas había descendido ligeramente hasta los 5,76. Un volumen suficiente para llevarse por delante alrededor de 1.000 hectáreas de campo y dejar aislada una granja con 1.800 cerdos que se encuentra en la zona de Las Canteras. Si el viernes no ha descendido el nivel habrá que alimentar a los animales con ayuda del helicóptero del 112, explicó el alcalde, José Ayesa.

En Boquiñeni y Pradilla el agua también ha hecho de las suyas inundando gran parte de los campos. La ausencia de motas de protección mantuvo en vilo durante todo el día a sus vecinos temerosos de que el agua alcanzara sus casas. En Alagón el Ebro llegó a los 5,79 metros.

La crecida llegará esta tarde a Zaragoza con un caudal entre los 1.200 y 1.500 metros que se podría ver alterado por el volumen de agua que aporte el Jalón. Ayer alcanzó la máxima con 278 metros cúbicos por segundo a su paso por Grisen.