El Pleno del Ayuntamiento de Zaragoza ha aprobado hoy provisionalmente las ordenanzas fiscales de 2016 planteadas por PP, PSOE y Ciudadanos, después de que el equipo de Gobierno de Zaragoza en Común (ZeC) no haya logrado recabar el apoyo de los socialistas para su propuesta.

De este modo, el tipo impositivo del IBI residencial disminuirá un 21,7 por ciento en 2016 para compensar la subida de los valores catastrales, mientras que se mantendrá para el resto de usos, mientras que se mantiene en el resto de usos.

La propuesta de ZeC de gravar más a comercios y oficinas a partir de un umbral de 750.000 euros de valor catastral -anteriormente la habían fijado en 230.000 y, posteriormente, en 500.000 euros- no ha salido adelante, por lo que se mantendrá el umbral en el millón de euros.