Un estudio realizado por la Universidad de Zaragoza entre 7.367 municipios españoles revela que existe un aumento progresivo de las actividades creativas en el medio rural como herramienta de desarrollo.

El trabajo, indican fuentes de la Universidad de Zaragoza en una nota de prensa, identifica a 541 municipios españoles y 115 clústeres espaciales de actividades con un elevado contenido creativo relacionadas con las Artes y el Patrimonio, Comunicación, Consultoría, Ingeniería o Arquitectura.

Revela el estudio que aunque persisten los problemas estructurales en el medio rural, actualmente en las pequeñas ciudades y en las áreas rurales se están desarrollando líneas de trabajo nuevas que se van consolidando paso a paso, como es la implantación de actividades creativas que ya no se circunscriben sólo a áreas metropolitanas.

La investigación se ha realizado sobre 7.367 municipios españoles de menos de 50.000 habitantes situados fuera de las grandes áreas urbanas, y ha sido llevada a cabo por un equipo interdisciplinar dirigido por la profesora Ana Isabel Escalona, profesora titular del Departamento de Geografía y Ordenación del Territorio y miembro del Grupo de Estudios de Desarrollo Territorial del Instituto de Investigación en Ciencias Ambientales (IUCA) de la Universidad de Zaragoza.

El estudio, publicado en el "Journal of Rural Studies" y en otros reconocidos medios académicos, recuerda que la compleja situación de muchas áreas rurales y su difícil convergencia con el nivel de rentas y de bienestar de las áreas urbanas justifican la búsqueda de nuevas fórmulas para impulsar su desarrollo territorial.

En el caso concreto de las áreas rurales españolas, y de las del interior en particular, su declive demográfico, social y económico requiere identificar qué posibles dinámicas innovadoras existen y hasta qué punto pueden contribuir a paliar su decadencia estructural.

En esta línea se enmarca la posible inclusión de las áreas rurales entre las beneficiarias de las estrategias de especialización inteligente, que consisten en identificar y aprovechar las ventajas competitivas del territorio en términos de conocimiento e innovación.

Las nuevas iniciativas desarrolladas son un conjunto heterogéneo en el que se incluyen desde las actividades arraigadas en la cultura tradicional, como las artes, la comunicación o las que proporcionan bienes y servicios con un elevado contenido creativo (software, publicidad, ingeniería, consultoría o arquitectura).

Aunque existen numerosos estudios sobre las actividades creativas en las grandes ciudades y regiones metropolitanas españolas, las pequeñas ciudades apenas han sido objeto de estudios específicos desde esta perspectiva, recuerdan las fuentes.

Los 7.367 municipios estudiados representan el 90,8 % de los españoles, albergan al 32,2 % de la población total y abarcan el 90,7 % de la superficie del país.

Las zonas rurales de Cataluña, Comunidad Valenciana y País Vasco concentran la mayoría de clústeres creativos.

En las áreas rurales del interior también existen clústeres creativos, aunque sin continuidad espacial y con menos intensidad que la mostrada en los entornos metropolitanos.

En el caso de Aragón, coinciden con localidades que desempeñan funciones de cabecera comarcal como Alcañiz, Calatayud, Barbastro y Teruel.

El estudio revela, asimismo, que las localidades que albergan o forman parte de clústeres creativos presentan mejores características de las que no lo tienen, en términos de dinamismo demográfico, capital humano, mercado laboral y actividad económica.