Una fuga de gas obliga a desalojar más de 30 viviendas

Un escape de gas se produjo en la mañana de ayer en la localidad zaragozana de Cadrete y más de 30 viviendas de la zona tuvieron que ser desalojadas por seguridad. Al cierre de esta edición, algunos vecinos habían podido entrar a sus casas pero los más próximos a la fuga todavía no habían podido regresar porque los profesionales no habían terminado de expulsar y quemar el gas que contenía.

El suceso se produjo cuando una retroexcavadora, que operaba en una zona de obras, perforó un depósito de gas propano instalado en una urbanización de viviendas unifamiliares, en la calle Cortes de Aragón. La vía, que es una de las arterias principales del municipio zaragozano, quedó cortada al tráfico desde que se originó la fuga, a las 11.45 horas, durante todo el día y parte de la noche hasta que consiguieron solventar la fuga.

El gas que fue liberado creó un intenso olor y generó momentos de tensión entre los vecinos. «Por suerte, no hay que lamentar daños personales pero podría haber pasado algo muy fuerte porque si el depósito llega a explotar no sé cómo estaríamos ahora», señaló a El PERIÓDICO el alcalde del municipio zaragozano, Rodolfo Viñas.

Una empresa especializada se hizo cargo de la situación al verter el gas con una manguera al exterior y dejarlo completamente limpio. Más tarde, decidieron, a primera hora de la tarde, quemar el gas que restaba. Además, también se desplazaron la Guardia Civil, una dotación de Bomberos de la Diputación de Zaragoza, procedentes del parque de Cariñena, y voluntarios de Protección Civil.

Según explicó Viñas, esta urbanización de viviendas utilizaba gas propano y «hace dos años se cambiaron al gas ciudad por lo que el depósito -de propano- tendría que haber estado vacío».

Añadió que a lo largo del día de hoy van a valorar la situación en el consistorio y «pediremos explicaciones a la urbanización de por qué se encontraba en estas condiciones, las actuaciones y el procedimiento que se llevó a cabo para el cambio y los informes que se realizaron en su momento para comprobar que cumplía con las condiciones de seguridad», señaló el alcalde cadretino.

«El problema al que nos encontramos ahora es que no sabemos cuántos depósitos inutilizados seguirán llenos de gas y pueden peligrar, no solo aquí en Cadrete, sino en toda la comunidad aragonesa», afirmó Viñas. Por este motivo, se deberán inspeccionar todos y cada uno de los depósitos «porque es posible que haya más como en este caso».

Una fuga de gas por la que, tras numerosas horas intentando controlar la situación, no hay que lamentar ningún daño personal. Por suerte, todo se quedó en un susto.