El transporte público registró 123 millones de viajeros en el 2019

El 2019 ha sido un buen año para el transporte público en Zaragoza. Cada vez son más los que optan por viajar en bus o en tranvía y prueba de ello es que el número de usuarios se incrementó un 3,13% el año pasado respecto al 2018 hasta alcanzar los 123 millones de pasajeros. El Urbos 3, a diferencia del resto de ejercicios, experimentó un mayor crecimiento después de un 2018 para olvidar, cuando perdió más de 400.000 viajeros como consecuencia de una huelga.

Tras estos buenos resultados, el 2020 comienza con un incremento en el precio del billete después de seis años congelado, pasando de de los 74 céntimos de ahora a 76 entonces a partir de febrero (siempre que se utilice la tarjeta bus). También se inicia con el proyecto de la línea 2 del tranvía enterrado, al menos, durante los próximos cuatro años después de que de Gobierno PP-Cs así lo decidiese al considerar que las arcas públicas están demasiado castigadas como para iniciar una obra civil de este calibre.

Durante los últimos cuatro años se ha producido un incremento de entre el 3% y el 4% del transporte público siendo el autobús urbano el rey de la movilidad. El año pasado transportó a 94,1 millones de personas, lo que supone un 2,98% más que en el 2018, cuando fueron 91,4 millones.

AL ALZA

Las líneas de bus con mayor crecimiento fueron las circulares, que registraron un total de 8,8 millones de validaciones, 533.997 más que en el 2018, lo que supone un aumento del 6,4%. Otras dos que también experimentaron un incremento en el número de usuarios fueron la 24, con principio y final en Las Fuente y Valdefierro, atravesando San José, Centro, Delicias y Oliver, y que alcanzó los 7,8 millones de viajeros, un 2,87% más que en el 2019, y la 33 con 6,9 millones y un crecimiento del 2,17% y que recorre Torrero, Centro y Delicias.

El tranvía también está de celebración. Si los usuarios del bus se incrementaron un 2,98% el año pasado respecto al 2018, en el caso del Urbos 3 el crecimiento fue del 3,64%, pasando de los 27,7 millones a los 28,8, las mejores cifras desde el inicio de su explotación comercial, puntualizaron desde la concejalía de Movilidad. Este asunto no es baladí porque el ayuntamiento tiene que pagar cada año a la SEM de Los Tranvías por incumplir con las previsiones estimadas en el número de usuarios que se hicieron con la firma del convenio. Pese a este aumento, la desviación respecto a las previsiones de ocupación calculadas sigue estando un 13% por debajo.

EN PILARES

Este crecimiento está relacionado con la huelga del tranvía en los Pilares del 2018, lo que provocó una pérdida importante de usuarios. El pasado año sucedió todo lo contrario porque durante las fiestas del Pilar se reforzó el transporte público. En el caso del Urbos 3, solo en el mes de octubre hubo casi 300.000 viajeros más, un 10,9% más que en los del 2018, pasando de los 2,9 millones a los 3,2. El autobús pasó de los 9,1 millones a 9,6, un 5,6% más.

El año negro para el autobús urbano fue el 2016, cuando se produjo una pérdida de usuario de hasta siete millones, hasta los 80,6, como consecuencia de la huelga más larga del transporte urbano, que duró la friolera de cuatro meses y que obligó al Ayuntamiento de Zaragoza a contratar a un mediador.

Aunque a los zaragozanos les costó recuperar la confianza en el servicio, al año siguiente las cifras ya volvieron a la normalidad, con 88,9 millones de pasajeros en el 2017, muy parecida a los datos del 2014, cuando fueron 88,3.

En el caso del Urbos 3 el crecimiento ha sido progresivo y más tímido. De hecho, la cifra del 2019 tampoco se aleja mucho de la del 2014, cuando fueron 26,9 millones las validaciones, dos millones menos que el año pasado.

El crecimiento en el número de usuarios es más estanco porque, a diferencia del autobús, con un gran entramado de líneas que prestan servicio en todos los barrios, solo da servicio a los barrios que completan su eje.

El bus y el tranvía aglutinan el 24% de los desplazamientos en la ciudad, una cifra que, por más que se intenta, no supera a aquellos que siguen utilizando su coche privado. Un 27% lo hace.

Andar sigue siendo la mejor alternativa y el 45% de los desplazamientos se hace a pie. Muy lejos de estos datos se encuentran los usuarios de las bicis, ya que tan solo representan el 3% de los desplazamientos totales. Ahora hay que añadir otra modalidad más, los vehículos de movilidad personal como los patinetes eléctricos, que ya representan el 25% de los desplazamientos por los carriles bici.

La estafa de las tarjetas, un asunto pendiente de resolverse

Piratear una tarjeta de autobús es sencillo. Solo hace falta un teléfono Android y una aplicación móvil para realizar una recarga de forma fraudulenta. Tanto la empresa que se encarga del servicio, Avanza Zaragoza, con el consistorio, están tratando de atajar este problema. Cada uno a su manera.

El ayuntamiento va a mejorar el sistema utilizado tanto en la tarjeta Ciudadana como Lazo para que sea prácticamente imposible piratearla. Aún así, las cifras son muy bajas, apenas 160 fueron hackeadas, especialmente la Lazo, que cumple la misma función que la ciudadana pero con la diferencia de que no es necesario estar empadronado en Zaragoza para utilizarla, por lo que es anónima. En dos años se han detectado 136 casos de recarga ilícita, son solo un 0,41% de las 33.504 que hay circulando por la ciudad. La cuantía defraudada, según la concejala, asciende a los 9.091 euros, sobre los 2,2 millones de recargas realizadas de forma legal.

La empresa Avanza lo que está haciendo es controlar diariamente las recargas que se realizan con el propósito de detectar movimientos sospechosos. De ser así, bloquean la tarjetas preventivamente y si comprueban que la recarga ha sido fraudulentamente la dejan sin actividad.