El presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán, consideraba "inviable" el plan de vuelta a las aulas que manejaba el Gobierno central para septiembre, con ratios de 15 alumnos por aula y separaciones de metro y medio entre los alumnos, con mascarillas desde los ocho años. Eliminada la propuesta de las ratios, sigue pidiendo flexibilizar las medidas de distancia y protección. Así lo ha expresado en su rueda de prensa tras la conferencia de presidentes de comunidades autónomas celebrada este domingo por videoconferencia. La número 14 en la pandemia y la última que se celebrará hasta finales de julio, cuando se vean las caras de nuevo, ya en persona.
Lambán ha expuesto el problema "logístico" que suponía esta vuelta inicialmente planteada, sin aulas suficientes ni fondos para contratar a tantos profesores. Pero respecto a las actuales condiciones pide "flexibilidad" al presidente Sánchez. A juicio de los responsables sanitarios aragoneses, criterio que comparten en Bélgica, por ejemplo, un metro de distancia sin mascarilla sería suficiente para la seguridad, y permitiría volver al colegio "con total normalidad". Lambán ha expresado serias dudas de que alumnos de ocho años vayan a llevar mascarilla todo el día. En cualquier caso, incluso si Sánchez no modificase el Real Decreto que regula estas medidas, la vuelta presencial se producirá y en condiciones de seguridad, ha garantizado Lambán.
SATISFACCIÓN CON LOS PLANES
Salvo en este asunto, Lambán se ha mostrado satisfecho con los principales anuncios de Pedro Sánchez hoy, si bien ha reconocido que se no se los ha detallado mucho. Así, ha agradecido el plan de apoyo a la automoción, que ya reclamaba, pero ha hecho hincapié en que, aunque Aragón "apoya la movilidad sostenible", no tendría "demasiado sentido" que las ayudas solo fueran para el vehículo eléctrico, pues de estos coches "todavía se fabrican pocos", son más caros y "todavía no hay suficientes puntos de recarga". De ahí que haya sugerido que, para que el plan realmente contribuya a reanimar el sector, las ayudas alcancen a todo tipo de vehículos.
Lambán ha mostrado también su alegría por la reapertura de fronteras, una noticia "absolutamente espléndida" para el Alto Aragón en particular. Asimismo ha alabado el anuncio de un plan de apoyo al turismo, que fue el primero en reclamar.
DEFENSA DE LAS RESIDENCIAS
Ante las críticas que se están multiplicando entre partidos y otras comunidades autónomas en cuanto a la gestión de las residencias de mayores en Aragón, Lambán ha admitido que le están causando "gran irritación", y ha defendido un modelo que, aunque haya que revisar, le deja "fundamentalmente satisfecho". Considera "inadmisible" que lleguen críticas de territorios (como las del portavoz popular en el Senado Javier Maroto) con una letalidad del 12% en residencias, cuando en Aragón ha sido de un 4% (inferior a la media nacional) y hay mucha más población mayor e interna en estos establecimientos. Ha instado a "no tirarnos los trastos y enredar con cifras", buscando en su lugar el bien común.
EL PLAN DE AYUDAS, ESTA SEMANA
Pese a que el presidente aragonés anunció tras la firma de la estrategia aragonesa de la recuperación que esa misma semana, la pasada, detallarían cuánto podía aportar el Gobierno de Aragón, todavía no lo ha hecho. Este domingo ha afirmado que tienen "casi cerrada" la reformulación del presupuesto, "hecho trizas" por el covid, y esperan presentarlo esta semana y aprobarlo la que viene, pendiente de la ratificación de las Cortes.
No ha avanzado cifras más allá de que será "superior al 10% del presupuesto", pero sí ha avanzado que habrá medidas de liquidez para los sectores más afectados, como el comercio, turismo y autónomos, ayudas para sufragar los gastos derivados de la covid-19 y bonificaciones a la Seguridad Social para incentivar la contratación, entre otras.
Además, también esta semana el Gobierno de Aragón, junto a los de las dos Castillas, renovarán una petición ya hecha al Gobierno central para que los territorios más despoblados (Teruel, Soria y Cuenca) cuenten con una importante bonificación fiscal, de hasta el 20% para empresas que creen empleo en las zonas, como ya la tienen en algunas zonas del norte de Europa.
