Dos trenes de la línea férrea entre Barcelona y Zaragoza por Caspe en los que viajaban unos 120 pasajeros en total han sufrido sendas averías y los ocupantes del primero de ellos, que se ha quedado detenido delante de un túnel, han sido trasladados en distintos vehículos a la estación de Nonaspe tras más de cuatro horas de espera.

Este convoy se ha parado entre dos estaciones a las 13.10 horas y se ha enviado otro tren, el que hace el recorrido entre Zaragoza y Barcelona, para remolcarlo, tras dejar a los pasajeros en Nonaspe. Pero no ha sido posible porque este segundo convoy, el Regional Exprés 17050, ha sufrido asimismo una avería en la citada estación y no ha podido aproximarse adonde se encuentra el procedente de la capital catalana.

La idea de los responsables de Renfe era que la locomotora de la segunda unidad ayudara a la primera, pero no ha sido posible y los técnicos trabajan en estos momentos para arreglar el problema.

Renfe ha atribuido las averías a "incidencias técnicas", en el primero de los trenes relacionadas con los compresores de aire. "Hemos pasado cuatro horas incomunicados, sin cobertura, pero afortunadamente ha funcionado el aire acondicionado", ha señalado Manel Pina, un viajero que iba a Caspe en el primer convoy. Manel ha elogiado el comportamiento del revisor y del maquinista, que en todo momento les han tenido informados y han tratado de que funcionara correctamente la climatización.

Un grupo de viajeros afectado por la avería aguarda en la estación de Nonaspe. SERVICIO ESPECIAL

Transbordo

Vehículos de Protección Civil, de la Policía Local de Caspe y de los Bomberos de la DPZ se han acercado al primer tren averiado y han trasladado a los viajeros a Nonaspe para que pudieran continuar el viaje.

Por todo ello, ha quedado interrumpida la circulación entre Nonaspe, Fayón y La Puebla de Masaluca, lo que afecta a las circulaciones de ancho convencional que realizan el recorrido Zaragoza-Reus, según informa Adif

Los pasajeros del segundo tren se encuentran en la estación de Nonaspe, donde llevan más de dos horas “a pleno solo, sin siquiera agua y sin explicaciones”, según apunta uno de los afectados en Twitter.

Renfe habilitó ayer trenes y autobuses para llevar a los 120 viajeros afectados por las averías a destino. «Había alrededor de 60 personas en cada convoy», señalaron fuentes de la compañía ferroviaria. Los que iban a Barcelona hicieron transbordo a un tren y a un autobús que siguió el recorrido por las localidades de la línea.

En cuanto a los que se dirigían a Zaragoza, todos ellos subieron a otro tren que, desde Nonaspe, lo trajo a la capital aragonesa. Al cierre de esta edición, dos equipos de mecánicos de Renfe seguían tratando de reparar las averías en los dos trenes que se vieron afectados y que quedaron detenidos en medio de las vías.