Schmitz Cargobull Ibérica puso este miércoles la primera piedra del proyecto que levantará en Figueruelas y que empezará a funcionar en agosto del próximo año. La nueva factoría, en la que se invertirán alrededor de 19 millones, permitirá triplicar la actividad (hoy fabrica 20 vehículos diarios) y, por tanto, el empleo, que en estos momentos ronda los 280 trabajadores.

La nueva factoría mantendrá las líneas e incorporará otras. Allí se producirán lonas correderas, además de semirremolques frigoríficos, furgones y vehículos destinados a la distribución urbana y espumado para vehículos frigoríficos y furgones. Esta última es una nueva línea que verá crecer su producción en los próximos años.

La nueva planta, localizada a tan solo tres kilómetros de la actual, se levantará sobre una superficie de más de 104.000 metros cuadrados, de los que 16.400 se destinarán a producción y logística, otros 2.000 a oficinas, que ocuparán tres plantas. Además, habrá una campa para vehículos nuevos y de ocasión. La nueva planta permitirá triplicar el volumen de producción y facturación, que ahora ronda los 130 millones de euros.

Exportaciones a Francia, Portugal, Italia y África

El presidente del Consejo de Administración de Schmitz Cargobull AG, Andreas Schmitz, destacó que «cuando empezamos este proyecto en 2002, nuestra previsión de fabricación era de cinco semirremolques al día, hoy estamos en 20, aunque nuestro objetivo es acabar 2021 en 22 unidades diarias». Además, precisó que gracias a la innovación en los procesos y el desarrollo de nuevos productos y servicios que han integrado la digitalización «hemos conseguido aportar soluciones de transporte, no solo al mercado español sino también a Francia, Portugal, Italia y África».

Con el proyecto de la nueva fábrica, Schmitz Cargobull Ibérica mejorará la seguridad de los trabajadores, aumentará la capacidad de producción local, se flexibilizarán los procesos, se mantendrán los altos estándares de calidad habituales y se optimizará la productividad, dando lugar a un ahorro de costes. También se prevé una instalación solar fotovoltaica para autoconsumo, con el objetivo de reducir el impacto medioambiental y abogar por la sostenibilidad.

El director general de Schmitz Cargobull Ibérica, Jordi Romero, destacó que en los últimos cinco años la facturación y la producción «se han duplicado» respecto a los cinco años anteriores. De esta forma se han logrado ingresos por valor de 130 millones y producido 4.000 unidades. Ello ha permitido elevar la plantilla en un 60%.

El alcalde de Figueruelas, Luis Bertol, subrayó la importancia de la nueva factoría. «Este acto marca el inicio de las obras y significa la consolidación de Figueruelas como nodo fabril del norte de España, así como referente económico y generador de empleo del corredor del Ebro». Al acto asistió también el director general de Industria y pymes, Carlos Javier Navarro, el director general de CEOE, Jesús Arnau.