El presidente de Aragón, Javier Lambán, ha asegurado este miércoles que no entiende los distintos obstáculos que el alcalde de Zaragoza, Jorge Azcón, está poniendo a su propuesta de construir viviendas en los conocidos 'cacahuetes' de la Expo, donde el Ejecutivo anunció que va a levantar 500 pisos. Lambán ha explicado que habitualmente estas propuestas son recibidas con "alborozo" y con los brazos abiertos "por alcaldes y ayuntamientos de otros puntos de Aragón", algo que no ha ocurrido en este caso. "Desde que anuncié la medida no ha hecho más que plantear problemas, poner obstáculos y generar dudas", ha dicho Lambán en referencia a Azcón. Y ha recalcado que las quejas han llegado «antes de conocer el proyecto», que todavía no se ha explicado «cómo se va a hacer».

Tras la firma de un convenio con la entidad pública empresarial de suelo Sepes para impulsar suelo industrial en el polígono de Malpica, el presidente aragonés ha reconocido que se siente sorprendido por los problemas que ha ido acumulando esta medida y la postura del ayuntamiento sin que exista una propuesta concreta. «Lo vamos a hacer», aseguró Lambán, quien esgrime que desde el Gobierno de Aragón "no nos lanzamos a una aventura y a anunciarlo sin saber que se puede hacer». No obstante, ha mostrado su disposición, «si el alcalde quiere hablarlo», a tratarlo en la reunión bilateral que mantendrán ambas instituciones el próximo lunes.

Según Lambán, esa parte del recinto de la Expo es una zona desolada al estar deshabitada y que «gran parte del día parece el desierto del Sahara». Mientras no tenga vivienda, «a esa zona le faltará algo, no estará plenamente integrada en la ciudad», ha insistido el presidente, que entiende que el hecho de que haya gente viviendo en lo que fue la antigua Expo «le viene de maravilla a la ciudad».

La ventaja de los 'cacahuetes' es la «relativa facilidad» con la que se puede llevar a cabo esta actuación en comparación con otras para construir las viviendas para que los jóvenes lo puedan utilizar pronto», ha concluido.