La Muela inauguró en 1987 su primer parque eólico de forma un poco experimental. Fue entonces cuando la silueta del paisaje se vio alterada por la presencia de gigantescos molinos que aprovechaban el soplo del cierzo para generar energía. Lo que nació como algo novedoso ha terminado por implantarse con fuerza al amparo del boom de las renovables. El municipio no solo ha sabido sacar provecho del viento sino también del sol, lo que le reporta unos cuantiosos ingresos anuales derivados de los impuestos por su explotación.
En la actualidad, La Muela cuenta con más de 350 aerogeneradores instalados, dos plantas fotovoltaicas y una previsión de otras tres, además de otros proyectos previstos entre parques híbridos, solares y fotovoltaicos. «Hay varias solicitudes, que ya han pasado el trámite de la evaluación de impacto ambiental del Gobierno de Aragón y está previsto que se vayan a instalar otras dos o tres plantas fotovoltaicas más», anunció el alcalde, Adrián Tello.
Respecto a la energía fotovoltaica, La Muela dispone de las plantas Los Belos y Torrubia y otras tres en trámite para su futura construcción: La Pena 1, La Pena 2 y Ballobar. Por su parte, los parques eólicos se reparten en 14 parajes del término municipal. La Muela II es el más grande con 40 aerogeneradores, seguido de El Pilar, La Plana III y La Muela III con 25 y La Carracha y Plana de Jarreta con 24. «Es posible que un tercio de los aerogeneradores originarios que tienen más de 25 años de antigüedad se vayan a sustituir colocando menos molinos pero generando el doble o triple de potencia», adelanta Tello.
Hace tres años, el consistorio ingresó casi 3,4 millones de euros por las licencias urbanísticas para la implantación de las plantas fotovoltaicas de Torrubia y Los Belos y del parque eólico El Portillo. De forma paralela se puso en marcha la implantación de tres solares (La Pena 1, La Pena 2 y Ballovar) en una superficie de 392 hectáreas, una potencia de 140 MW y una inversión superior a 78 millones de euros.
Casi el 9% del presupuesto
La implantación de energía limpia en La Muela supone unos ingresos a las arcas municipales de «unos 780.000 euros anuales», apunta Tello, lo que supone casi el 9% del presupuesto municipal, que ronda este año los 9,5 millones de euros. Una cantidad que podría llegar «al millón de euros con los proyectos que van a venir».
Dicha inyección económica extraordinaria permite al consistorio financiar parte de los servicios públicos y la ejecución cada año de proyectos que de otra forma no podría acometer. Entre las últimas inversiones previstas destaca la construcción de una red de vertido y saneamiento para 800 viviendas del municipio, un andador que conectará las urbanizaciones con el casco urbano de La Muela y la compra de una parcela para convertirse en párking público que solucione los problemas de aparcamiento y movilidad en un casco urbano donde antes vivían 1.000 personas y ahora más de 6.000.
Además de la instalación de parques eólicos y fotovoltaicos, el Ayuntamiento de La Muela apuesta por el autoconsumo con la colocación de placas en edificios y equipamientos públicos y bonificando a las propietarios de viviendas que instalen placas solares en sus tejados.
