Michael Jackson también pasa por un mal momento financiero. Hace cuatro años pidió un crédito de 200 millones pero utilizó como aval el catálogo con canciones de los Beatles y Elvis Presley, de cuyos derechos obtiene gran parte de sus ingresos. Además de onerosos pagos en juicios y de hábitos de gasto fuera de control, el cantante debe negociar un nuevo contrato con Sony. Neverland, el fastuoso rancho que compró por 28 millones de dólares, ahora vale menos de la mitad.