INTERPRETES: Filarmonía Clásica y Coro Chur Cölnischer de Bonn, H. Beissel

LUGAR: Sala Mozart del Auditorio

FECHA: Martes, 8 de marzo

ASISTENCIA: Lleno

El ciclo primaveral del Auditorio se reanudó anteayer con la visita de los conjuntos fundados en Bonn por el director Heribert Beissel: la Klassische Philharmonie y el Chur Cölnischer Chor. En los atriles destacaba la magnífica Missa in angustiis de Haydn (más conocida como Misa Nelson ), una obra dramática y paradójicamente optimista, precedida por el popular Stabat mater de Pergolesi y la concisa y primeriza Misa K.194 de Mozart.

No sólo contenía la obra de Haydn los momentos más sublimes de la velada, sino que fue allí donde los intérpretes parecieron más a gusto. Beissel llevó la misa a un ritmo vivo, enfatizando los acentos, exigiendo del coro una dicción perfecta y obteniendo resultados encomiables del cuarteto solista, compuesto por cuatro voces muy jóvenes de distintas procedencias (del agudo al grave: rusa, ucraniana, alemán y coreano) y con formación berlinesa. El tono vivaz permitió apreciar la calidad dramática de la Nelson más allá de la belleza de sus líneas melódicas. Y aunque el enfoque no era historicista, resultaba obvio que había mucho asumido en esta línea.

Si en Haydn se empleó la versión orquestal con maderas añadidas, que no es la original (y parece ser que ni siquiera es del todo de Haydn), pero respeta el tono instrumental en lo esencial, en la Missa brevis de Mozart se optó por emplear violas (no están en la partitura), eliminando el trío de trombones que dobla al coro. Eso provocó un cambio de color, restando solemnidad a la lectura. De todos modos, esta misa es una obra circunstancial, donde Mozart recorre a toda prisa el texto litúrgico para poder detenerse un par de veces en momentos de mayor lirismo, así que la pérdida era menor.

Con el Stabat mater de Pergolesi también hubo una cierta indecisión estilística. La precisión del grupo de cuerda (gente muy disciplinada) y la buena afinación del coro no consiguieron sacar a la página de una cierta insipidez.