Riccardo Muti, el director musical de La Scala de Milán, decidió ayer que no dirigirá la orquesta Filarmónica del famoso teatro durante el concierto programado para el próximo viernes por desavenencias con los músicos. La polémica entre el maestro y la formación se arrastraba desde hacía días pero ayer culminó con una breve carta del maestro en la que afirma que "a causa del clima de rumores, ofensas e incomprensiones que se han creado" en las actuales circunstancias "no existen las condiciones objetivas para hacer música juntos".

En realidad, según publican varios expertos musicales italianos, detrás de la polémica existe un gran malestar por lo que algunos han definido como "el progreso de los berlusconianos" en las instituciones culturales de Milán. Fedele Confalonieri, presidente de Mediaset, ha contestado esta acusación asegurando que se trata de una opinión equivocada.