El proyecto para llevar a la gran pantalla la novela Independencia, del profesor y escritor aragonés José Luis Corral, ha dado un giro espectacular. La película, en estos momentos paralizada, se retomará tras el verano para rodarse en inglés con la intención de abordar el mercado internacional. El impulso llegó en el pasado festival de Cannes, cuando el director británico Ridley Scott aceptó participar en el filme como productor. La idea es estrenar la cinta en febrero del 2010.

Scott, que ya conoce a José Luis Corral desde 1992, cuando contó con él como asesor para su película 1492. La conquista del paraíso, rubricó en pleno certamen francés un preacuerdo con Antena 3 TV y Planeta para coproducir la película sobre Los Sitios de Zaragoza, que, por otra parte da otro considerable salto en el presupuesto, pasando de los 24 millones de euros previstos inicialmente (que ya la convertían en la más cara de la historia del cine español) a los 36 millones.

Un presupuesto muy elevado para un filme en castellano que hace recomendable el salto internacional."Si se rueda en nuestra lengua no podría recuperar nunca la inversión, y más cuando en el mercado americano no se doblan las películas, sino que se subtitulan, por lo que no llegaría a las líneas de difusión fundamental, sino a salas de categoría B", explica Corral.

Si el preacuerdo llega a concretarse, como todo parece indicar, el rodaje comenzaría tras el verano, ya que el equipo de Independencia fue reclutado por Alejandro Amenábar tras la paralización del proyecto inicial, y ahora se halla grabando en Malta su película Ágora. Una vez que concluya el trabajo de Amenábar y pasen las vacaciones, la maquinaria de Independencia volverá a ponerse en marcha. "No es difícil, pues la mayor parte de la preproducción está hecha", recuerda Corral.

CAMBIO DE DIRECTOR

Y es que cuando se abandonó el proyecto ya se había construido prácticamente la mitad del decorado móvil y el atrezzo, con un 60% de los 1.500 trajes de época o un centenar de cañones de hierro, listos para disparar.

La entrada de Ridley Scott ha hecho variar, eso sí, tanto el responsable de la dirección de la película como el elenco previsto, que no anunciado, de actores. Así, finalmente no será Antonio Toledo el encargado de ponerse tras la cámara, sino un director que está por elegir, y éste será a su vez el que seleccione a los protagonistas, que, está previsto sean de renombre internacional.

Lo que no varía es el plan previsto de rodaje, pues se pretende grabar los dos Sitios de Zaragoza en tiempo real, uno en verano y otro en invierno del 2009, y mantener los escenarios naturales elegidos: Épila, Belchite, Calatayud, Sariñena, La Cartuja y, desde luego, Zaragoza. De igual forma, se mantiene el número de 13.000 figurantes necesarios para plasmar las escenas.

Tampoco varía la participación prevista de las instituciones aragonesas. Así, Gobierno de Aragón, Ayuntamiento de Zaragoza y Diputación Provincial de Zaragoza tienen previsto financiar el filme aportando siete millones de euros entre las tres, de los cuales el 50% serían aportados por la DGA.