"Bueno pues ya está. Jolín, ¿y ahora qué?". Esto es lo que preguntaba Laura Quílez, de 16 años, a sus amigos después de ver la última película de la saga de Harry Potter, Las reliquias de la muerte, parte 2. Y es que la odisea del mago ha llegado a su fin y ninguno de sus fans zaragozanos ha querido perderse el estreno en la gran pantalla de su última aventura. "Reservé la entrada la semana pasada, no quería pasar ni un día más para esperar a ver el final", decía entusiasmado Jorge Salas, de 12 años, que miraba el reloj esperando entrar a la sesión.
Tras una década, acudiendo a los estrenos veraniegos o navideños de la saga, los personajes han evolucionado, y con ellos los actores. De esta forma, también han crecido los fans, que son de todas las edades. Aquellos que crecieron leyendo los libros, son ahora jóvenes casi adultos y, los niños que se hicieron fans con las películas son ahora adolescentes. "Me hice fan de Harry en primero de la E.S.O. y ahora he terminado la carrera", contaba Diego Arnal, que acompañaba a su hermano de 13 años, "Vine a ver la primera película con mi hermano, me gustó, y hemos venido a ver las ocho siempre juntos", añadía Sergio.
El cruel enfrentamiento entre Harry y su némesis, ese Lord Voldemort de rostro transfigurado, era sin duda el momento más deseado por los fans desde hace varias películas, así que la batalla se convierte en lo más comentado por los que salen de ver la cinta. "Ver a Lord Voldemort en acción me ha puesto los pelos de punta, ¡ha sido genial!", decía Diana, de 12 años. "Se me ha hecho muy corto, tendría que ocupar más parte de la película", se quejaba su hermano gemelo, Luis.
Con el final de la saga sus responsables estarán nostálgicos, pero también aliviados, sin embargo no se puede decir lo mismo de los fans, que salían ayer tristes y apenados de la sala sabiendo que no habrá ninguna nueva historia del mago más famoso del cine el próximo verano. Porque el final, ya está escrito... en el cine.
