Está solo en el escenario, sin embargo se rodea de más de 70 personajes de lo más variopinto. Carlos Latre presenta desde hoy (22.00) y hasta el domingo en el Teatro Principal su espectáculo Yes, we Spain. Las entradas pueden adquirirse en las taquillas y en la web y cajeros de la CAI, aunque ayer por la tarde, para la sesión de hoy quedaban unas 40; para las de mañana, 95; y para el domingo, alrededor de 200. Los que tienen asiento asegurado son sus familiares de Siétamo, de donde era su bisabuelo.

La trama se sitúa es la España del 2011, o sea, hoy, en un momento en el que el país se sitúa en una "hipotética bancarrota", aseguró el humorista durante la presentación. El presidente Zapatero se ve en la "tesitura de levantar el país"; así que se reúne con Rubalcaba, Carme Chacón, Esperanza Aguirre, Rajoy y otros "y ahí explota todo"; y es que Zapataro cree que la solución a todos los problemas del país está en la visita del presidente americano; si logra convencer a Obama de que visite España "todo se solucionará".

PERSONAJES En esa visita se "implicará todo el que tiene que estar, o sea, personajes de televisión, deportistas, músicos, actores, etc". De ahí que por el escenario desfiles, estando solo Latre en él, Andrés Iniesta y su característica alegría, Andreíta y su madre, Belén Esteban, Boris Izaguirre, Rubalcaba, como fan de Britney Spears; Torrente, Shakira, manolo García, Sabina y así hasta "setenta y pico personajes". Además, en una "obra de teatro y no un show" tan pegada a la actualidad no podían faltar personajes de la ciudad, como "Jorge Berrocal, Belloch y otros", y, como no, el público que asista a la función, que podrá disfrutar de primera mano de la visita de "Obama hasta Zaragoza".

"MUCHAS RISAS Latre propone tres sesiones de "muchas risas" donde lo físico es importante ya que durante más de hora y media no para; ya que además de imitar e interpretar se atreve a bailar.

Y es que Yes, we Spain es una función totalmente diferente a lo que Latre tiene acostumbrado a su público. Una idea que comenzó durante unos talleres de teatro clásico con Joan Lluis Bozzo "y vimos que algunos de los personajes eran muy actuales"; así que el espectáculo "sigue mi línea pero vamos un poco más allá". Y es que no deja de ser un "reflejo de la realidad, deformada pero realidad", con el que "podemos mirarnos y reírnos de nosotros mismos".

Todos los personajes tienen su dificultad, pero quizá Rubalcaba el que más porque "he tenido que trabajar mucho con la imaginación", ya que no existe ningún tipo de caracterización.