Director y guionista

Nacido en Mallorca en 1953

Debutó en el largometraje en 1987

Si alguien se guía por sus películas (Arto Tolbukhin: en la mente del asesino, Tras el cristal, El niño de la luna) puede pensar que Villaronga es un tipo sórdido y desagradable. Nada más lejos de la realidad. El humilde Villaronga, hijo de un cartero que le contagió su amor por el cine, decidió ser director a los 14 años, después de estar 13 en un asfixiante colegio de jesuitas. Licenciado en Geografía e Historia, ha hecho de todo: documentales, tv movies y videoclips.