Los famosos no paran ni en vacaciones. La modelo Kate Moss se fue a reunir con su marido, Jamie Hince, a Australia para seguir los últimos conciertos de su grupo, que serán en Asia. La pareja, que se casó el pasado 1 de julio, parecía seguir de luna de miel, enamoradísima y cogida de la mano en el aeropuerto. También feliz y sonriente estaba la cantante Alanis Morrisette y su marido, Mario Souleye Treadway, paseando con su hijo Ever en el barrio de Venice, en Los Ángeles (California). La actriz inglesa Elisabeth Hurley, divorciada del magnate indio Arun Nayan, no mostraba la misma cara de felicidad pese a ir seguida por su actual novio, el deportista australiano Shane Warne. Y eso que él la acompañó a todas partes, incluso al set donde rueda en Nueva York nuevos capítulos de la serie Gossip Girl. Jennifer Lopez, otra mamá trabajadora, dejaba claro que su objetivo es seguir adelante tras separarse de Marc Anthony. Lo hizo en Atlanta, rodando su nueva película, Qué esperar cuando se está esperando, adaptación cinematográfica de un best- seller para futuras mamás en el que también participa Cameron Diaz. Más relajado, y ajeno a todos los problemas que pueda tener, el actor Bruce Willis paseaba plácidamente por Beverly Hills.
