El director y guionista navarro Montxo Armendáriz y su película Las cartas de Alou inauguraron ayer el ciclo El cine de la vida, una nueva iniciativa de Ibercaja que tratará, con la proyección de una película al mes --acorde con las líneas prioritarias de actuación de la obra social de la entidad-- con temáticas como la educación, la inmigración o la problemática laboral. La iniciativa tiene el objetivo de, tras la proyección de diferentes títulos, realizar una tertulia que "nos haga debatir y compartir experiencias y visiones", explicó la directora de la Obra Social Teresa Fernández.

Las cartas de Alou se estrenó en 1990, cuando el asunto de la inmigración estaba emergente y la preocupación por esta todavía no había trascendido. De esta forma el largometraje se convirtió en pionero en el tema y recibió grandes elogios de los críticos, además de obtener la Concha de Oro en el Festival de Cine de San Sebastián.

CONVIVENCIA Para documentar y relatar la historia de un joven inmigrante que llega a España y se ve forzado a trabajar en condiciones precarias, Armendáriz convivió durante más de tres meses con unos jóvenes africanos que vivían en Pamplona: "Siempre veía en un bar cercano a casa como se acercaba un joven a tratar de vendernos lo que llevaba dentro de una caja de herramientas y solo decía: bueno, bonito, tres mil", explicó el director. Desde entonces se obsesionó por comprender el motivo que le trajo a esas personas viajar hasta España, entabló amistad y comenzó a convivir con el y sus compañeros: "Quería conocer sus ilusiones y descubrí cómo vivían en condiciones lamentables y precarias, hacinados en pisos con condiciones insalubres". Fue entonces cuando decidió llevar a la gran pantalla sus historias de supervivencia y lucha por la dignidad: "Fue una experiencia inolvidable, conocí una gente que sin tener nada te ofrecían todo de una forma desinteresada", añadió el cineasta.

CINE Y EDUCACIÓN Luis Alegre, coordinador y presentador del ciclo, aseguró que "el cine también es un instrumento de formación, concienciación y aprendizaje". Por este motivo alabó la iniciativa por su idea de "provocar reflexiones sobre la realidad y hablar de asuntos de gran calado social a través del séptimo arte".

El ciclo comenzó ayer con el tema de la inmigración clandestina. Alegre aseguró que para inaugurarlo "no podría haber una película e invitado mejores", ya que Armendáriz se caracteriza por "su extraordinaria sensibilidad hacia determinadas realidades sociales". Prueba de ello son Secretos del corazón o No tengas miedo.

El ciclo continuará el próximo 21 de febrero en la sala Alcarria de Ibercaja con la proyección de la película La clase, y con Ángel Gabilondo, catedrático de Metafísica como invitado para hablar del fracaso escolar. Después seguirán películas como 4a planta, en marzo; Los lunes al sol, en abril; o La red social, en mayo.