Estaba ya cansada de enviar todo lo que escribía a "cien mil sitios", cuando vio el anuncio de La Trama y pensó que igual era su oportunidad: "Cuando me llamaron por poco me caigo de la emoción. Ha sido una sorpresa maravillosa", explica con sinceridad Laura Balagué. Ayer, su sueño vivó una etapa más, cuando recibió el Premio La Trama en el Teatro Principal en un acto que compartió con la galardonada de honor, Anne Perry.

"Supone sacarla a la luz y el reconocimiento de que alguien que no te conoce y que no te quiere, le interesa algo de lo que escribes porque la gente que habitualmente lo lee como tiene una relación contigo pues no puede ser imparcial, siempre lo mirarán con buenos ojos. Que sea un jurado te da un poco de más tranquilidad". Los expertos consideraron que su novela Las pequeñas mentiras era la mejor de todas las presentadas. La misma aborda, en palabras de su autora, "las mentiras que todos llevamos encima". La novela se inicia con el descubrimiento del cadáver de Cristina Sasiain, una mujer de la alta sociedad donostiarra, en el interior de su lujosa peletería. La inspectora de la Ertzaintza Carmen Arregui recibe el encargo de esclarecer la muerte, para lo cual tendrá que sumergirse en el complejo entramado de relaciones de la víctima mientras recorre un San Sebastián lluvioso e invernal en busca de pistas. Y es ahí cuando aparecen un montón de cosas "que todo el mundo tiene que esconder porque cuando pasa un drama así, salen muchas cosas que igual permanecerían ocultas si no hubiera pasado una historia tan dramática". Todo ello, entremezclado con la aparición de "las flaquezas" de la inspectora y sus problemas.

"DE LECTURA MUY FÁCIL"

"Es una novela de lectura muy fácil, creo que si fuera un cómic sería de la línea clara porque me gustan las cosas fáciles de leer", desgrana Balagué que confiesa que lo escribió con la idea de establecer una saga lo que le dio "ideas para ir llevando la trama". Fue precisamente la búsqueda del personaje protagonista lo que más dificultades le planteó: "Me costó encontrar la voz porque me daba miedo poner una policía sin tener ni idea de cómo funciona una comisaría o una investigación". Al final, "Carmen Arregui salió un poco por casualidad en un relato y pensé que ya sería cuestión de aprender un poco cosas de cómo se realiza una investigación pero que el personaje era ese".

La novela transcurre en San Sebastián, la ciudad donde reside la escritora barcelonesa, que tiene un papel fundamental en la acción: "Es una ciudad muy fotogénica y eso le hace tener mucho protagonismo. Además, esta novela sucede en invierno y las ciudades de mar en invierno tienen un encanto especial".

Balagué, cuyos referentes en la novela negra son "Vázquez Montalbán, P.D. James, Anne Perry, los escritores nórdicos o Camilleri", defiende el éxito del género porque es "de evasión. La novela negra te atrapa y no la puedes soltar. A eso hay que añadir que es para muchos públicos y que tiene gran variedad de registros. Incluso a la gente que no le gusta el género puede encontrar autores que le gusten".