La crisis que sufre el sector cultural por la crisis sanitaria de la pandemia del coronavirus ha llevado a nueve asociaciones profesionales a unirse para defender un sector estratégico de la economía que da empleo a casi 16.000 personas y que de mantenerse la actual situación corre peligro de desaparecer.
Estas asociaciones, que se han dado a conocer este viernes bajo la denominación de Unión de Asociaciones profesionales y Empresariales de la Cultura en Aragón (ECA) y representan a más de 300 empresas en la comunidad aragonesa, han presentado su propuesta de Soluciones urgentes para la cultura en Aragón.
María López Insausti, de Ares, y Pachi Cano, de Aragón en Vivo, han ejercido de portavoces de todas las asociaciones para defender la producción cultural en Aragón y establecer un diálogo constructivo con las diferentes instituciones competentes, entre ellas y en primer lugar, con el Gobierno de Aragón.
En este sentido han remarcado que en sus reuniones individuales con las diferentes instituciones han detectado la desconexión que existe entre unas y otras porque muchas veces son ellos mismos los que tienen la sensación de comunicarles lo que va a hacer la otra institución. Por ello, defienden que van a tratar de encontrar la manera de coordinar a las diferentes instituciones ante un sector que supone el 3,2%del PIB.
Los objetivos que proponen buscan dar soluciones para un sector profesional que consideran, en algunos casos, abocado a su desaparición, algo que creen la sociedad no puede permitirse, dado que la cultura es una medida esencial a la hora de fijar los verdaderos valores de una comunidad y de proyectar sus capacidades.
También han recordado que por cada euro que se invierte en este sector tiene un retorno de tres euros, aunque Aragón es una de las comunidades autónomas que menos inversión realiza con tan solo 14,6 euros por habitante frente a una media de 25 euros en el conjunto del país.
Para ECA, es necesario coordinar las acciones que permitan la salvaguardia y la recuperación de los profesionales y empresas de la cultura en Aragón y el diálogo con las diferentes administraciones públicas para establecer compromisos de consenso.
Por ello, han defendido que ha llegado el momento de que el sector cultural sea entendido como "mayor de edad" porque cuando se habla de cultura se hace referencia a una industria con trabajadores, empresas y que supone para la economía una cadena de valor.
Han reconocido que 2020 está siendo un año muy duro y la única solución que les ha llegado desde la administración es un presupuesto escueto con escasas ayudas, porque Aragón está a la cola en inversión por habitante y lo que le piden es que se adecue a la posición que ocupa, la quinta.
Entre las mínimas medidas que proponen están las de que la Dirección General de Cultura dedique 25 euros por habitante con el objetivo de alcanzar en los próximos años el 2% del presupuesto; un compromiso de dos años (2021 y 2022) en ayudas estructurales con criterios consensuados y que ayuden verdaderamente a mantener al sector profesional de la cultura.
Además, demandan diseñar un plan extraordinario y específico de actividades culturales para los primeros seis meses de 2021 que incluya a todos los sectores que representan: Artes Escénicas y Música, Audiovisuales, Plásticas y Libro. También piden la creación de una mesa permanente con las asociaciones profesionales del sector para consensuar las políticas culturales del Gobierno y que no ocurra que cada vez que haya un cambio se deba empezar de nuevo todo el trabajo.
Ante la inminente aprobación del presupuesto del Gobierno de Aragón para 2021, han explicado que se han reunido con el presidente autonómico, Javier Lambán, y con casi todos los grupos políticos porque buscan consensuar el proyecto de presupuesto para cultura. Solicitan que al menos un 20 % de los fondos europeos para la reactivación económica que lleguen al Departamento de Educación, Cultura y Deporte se dirijan al refuerzo de Cultura y por último piden que la Cultura sea declarada bien esencial en la Comunidad aragonesa.
No obstante reconocen que todas las soluciones no están únicamente en las instituciones aragonesas sino que otras corresponden al Gobierno Central como la fiscalidad e IVA, o la Ley de Mecenazgo y Patrocinio Cultural entre otras.
