El teatro aragonés llora la muerte del actor y dramaturgo Pedro Rebollo, fallecido este jueves a los 59 años de edad. Intérprete de largo recorrido, director y crítico de teatro, trabajó con casi todas las compañías teatrales aragonesas, al tiempo que participó en algunas de las series más populares del país, como Aída, El comisario y Los Serrano, lo que le llevó a vivir a caballo entre Zaragoza y Madrid.

Actor profesional desde 1983 y formado en la Escuela Municipal de Teatro de Zaragoza, Rebollo trabajó con numerosas compañías aragonesas, como Teatro del Temple, Tranvía Teatro, Teatro de la Ribera, Teatro Arbole, Teatro Imaginario... Actualmente, formaba parte del equipo artístico de la compañía oscense Viridiana, dirigida por Jesús Arbués. En los últimos meses, de hecho, estaba representando sobre las tablas la adaptación de La lluvia amarilla –la novela que Julio Llamazares publicó en 1988–, con un texto adaptado y dirigido por el propio Arbués.

«Cuando se subía a un escenario había una magia especial; para mí uno de los mejores y más talentosos actores que he visto sobre las tablas de un teatro», destacó el director de Arbolé, Esteban Villarrocha, compañero y amigo personal de Rebollo: «Curiosamente nos conocimos ya en el instituto y desde entonces recorrimos vidas paralelas». Juntos impulsaron uno de los mejores proyectos recientes de Arbolé: el Caín de Saramago (2019). «Era impresionante ver cómo imitaba la voz del escritor portugués», señala Villarrocha, que también se rindió al talento de Rebollo en producciones anteriores de Arbolé: El Viejo y el Mar (2007) y El Poeta y Platero (2009).

«Tenía un talento escénico brutal, siempre brillante, selectivo, y con registros muy diferentes», señaló el actor y dramaturgo zaragozano Mariano Anós, gran referente de las artes escénicas en la comunidad. «Coincidimos ya en la Escuela de Teatro de Zaragoza, donde lo tuve como alumno, y luego trabajamos juntos en el Teatro de la Ribera y el Centro Dramático de Aragón, donde hicimos por ejemplo La vida es sueño bajo mi dirección en 2005», recordó Anós. Ambos talentos se juntaron también en uno de los últimos cortometrajes de Rebollo: Solo, de Lorenzo Montull.

Su pasión por el teatro la compaginó con inumerables trabajos y apariciones en el mundo del cine y la televisión. Así, participó en la película Réquiem por un campesino español, de Francesc Betriu, y en series como Hospital central, Aída, El comisario, Los Serrano, Águila Roja, Doctor Mateo, El Internado, Los hombres de Paco, El tiempo entre costuras...

Crítico teatral

 Rebollo también ejerció como crítico teatral durante años en Diario 16 Aragón. Allí coincidió con la periodista y escritora Ana Rioja, que por aquel entonces era la jefa de Cultura. «Estoy desolada, como todos los que te conocieron. Te quiero vivo, tan vivo como hace más de tres décadas, cuando me dijiste, ‘quiero colaborar con este periódico’ y me conquistaste con tu sonrisa», escribió ayer Rioja en sus redes sociales.

«Era un actor extraordinario; uno de los mejores que ha dado Aragón con mucha diferencia», destacó Paco Ortega, actor, dramaturgo y exdirector del Centro Dramático de Aragón. «Además de ser muy culto e inteligente, sabía contagiar con fuerza su ilusión cuando se entusiasmaba con un proyecto», apuntó ayer Ortega.

Su talento escénico se pudo comprobar en muchas obras, como por ejemplo La noche antes de los bosques, un monólogo del autor Bernard-Marie Koltès, interpretado por él. Se estrenó en el Teatro del Mercado en 2007, estuvo nominado a los premios Max y fue uno de las funciones con más trascendencia en la comunidad. «A mí lo que me gusta es explicar el mundo y que luego la gente que me ve me diga que gracias a lo que he contado ha entendido mejor la realidad», aseguraba el propio Rebollo en el año 2009 en una entrevista con este diario.

Además de formar parte del equipo artístico de la compañía Viridiana, actualmente dirigía varios grupos de teatro en los Talleres Municipales de Teatro y Danza de Huesca.

Nacido en 1962, Rebollo fue pareja de la actriz zaragozana Laura Plano, con quien tuvo su única hija.